Pese a que el sábado llegó un buque cargado de Gas Licuado de Petroleo (GLP), la mañana de hoy se mantenían las largas filas de vehículos y personas en las envasadoras que esperaban ser reabastecidas en cualquier momento.

En un recorrido por varias plantas se observó que sólo Onegas, de la calle San Juan de la Maguana, disponía del carburante y en esa envasadora la fila de carros se extendía hasta la avenida Máximo Gómez, mientras que la de personas era más corta.

En tanto, el presidente de la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa), Arístides Fernández Zucco, advirtió que el suministro de gas propano no se normalizará mientras persista un flujo de caja negativo que tiene esa entidad y que motivó el cierre del crédito por parte de los suplidores.

Mientras, en Santiago, varias envasadoras de gas licuado de petróleo comenzaron esta mañana a recibir y despachar al mismo tiempo el combustible ante decenas de personas.

Mientras tanto, el transporte público confrontó serias dificultades para laborar debido a la crisis en el suministro del GLP, que se acentuó el pasado fin de semana.

Ante la escasez del combustible, largas filas se formaron en las plantas, donde clientes llegaron a discutir por los puestos y en otras ocasiones hasta a desafiarse a los puños.

Como nunca faltan los «buscavidas» en los lugares donde hay crisis, se denunció que a las plantas distribuidoras de gas se presentaron buscones a vender los puestos entre 100 y 150 pesos.

Por otro lado, los precios de los pasajes en esta ciudad no han sido rebajados como dispusiera la Oficina Técnica de Transporte (OTTT), la semana pasada.

El concho en el transporte urbano sigue cobrando 8 pesos por persona, mientras que las pocas guaguas de la OMSA están cobrando 5 pesos.