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EL PASO, EEUU, (AFP).- El gobierno estadounidense se opuso ayer, jueves, en los tribunales a la liberación del anticastrista Luis Posada Carriles, acusado por un atentado con bomba que mató a 73 personas en un avión cubano, y no descartó mantenerlo detenido indefinidamente, según distintas fuentes.
La acción ocurre en la víspera del 30 aniversario del atentado, que Cuba va a conmemorar con una jornada especial hoy viernes, y Venezuela, desde donde se planeó el bombazo, hará lo propio en una ceremonia gubernamental.
En una moción de 22 páginas, el Departamento de Justicia estadounidense se opuso este jueves a una recomendación hecha por un magistrado federal en El Paso (Texas, suroeste) en setiembre pasado.
Determinando que Posada Carriles debía ser liberado porque había hecho todo lo posible por irse de Estados Unidos legalmente, pero sus intentos no han rendido fruto.
Posada Carriles está recluido desde el año pasado en un centro de detención en El Paso por entrar ilegalmente a Estados Unidos.
A Posada Carriles, con una orden de deportación pendiente, se le exige buscar a un país adonde irse, con excepción de Cuba o Venezuela -países de los que es ciudadano-, donde podría ser torturado, según determinó un juez migratorio.
A pesar de que ha hecho gestiones en Canadá, Guatemala, México, Costa Rica, El Salvador y Honduras, nadie se ha querido hacer cargo de su caso.
El magistrado entonces determinó que si nadie quiere recibir al anticastrista, de 78 años, tampoco puede quedar encarcelado indefinidamente.
Sin embargo, abogados del Departamento de Justicia alegaron que el hombre ha demostrado una poca común capacidad de buscarse un lugar donde vivir, mediante conexiones de alto nivel gubernamental en múltiples países latinoamericanos, y que debe seguir intentándolo.
Además, alegaron que aun si el tribunal decidiera que esos argumentos no tienen mérito, el juez que tome la decisión final debe darle tiempo al gobierno para que considere si lo mantiene detenido indefinidamente bajo circunstancias especiales que implican preocupaciones de seguridad nacional y política exterior.
En una declaración escrita, el departamento de control de Inmigración y Aduanas (ICE) expresó que Posada Carriles no será liberado porque es un peligro para la comunidad, puede fugarse y debe seguir buscando un país que lo reciba.
ICE agregó que le informó a Posada Carriles que el Departamento de Seguridad Interna considera, en consulta con el Departamento de Estado, si la detención debe seguir basada en que pudiera tener serias consecuencias en la política exterior de Estados Unidos.
Si el Departamento de Estado determinara que liberar a Posada Carriles es perjudicial a la política exterior del país, y el fiscal general lo certificara, se abriría la puerta a que el hombre quedara encerrado por tiempo indefinido en el país.
En este momento es prudente que esperemos por la decisión del juez, dijo a la AFP el abogado de Posada Carriles en Miami, Eduardo Soto, quien aseguró no haber leído aún la moción.
Al cuestionarle si su cliente corre el peligro de quedar detenido indefinidamente bajo custodia estadounidense, expresó que eso es absolutamente incorrecto, quien determina que pasa con él, su libertad, es exclusivamente el juez.
