POR MARIO MENDEZ
El presidente del Centro de Orientación Tributaria, licenciado Francisco Canahuate, expresó su desacuerdo con que se extienda el período de vigencia del impuesto del 1.5 por ciento sobre los ingresos brutos de las empresas, tras considerar que ese gravamen no aumentó las recaudaciones del impuesto sobre la renta en términos reales.

Al hablar en la puesta en circulación de su libro Vida y Tributo, Canahuate, señaló que el aporte del impuesto sobre la renta se ha mantenido invariable en el 3% histórico del Producto Interno Bruto.

«Es decir, la aplicación del 1.5% no aumentó las recaudaciones del Impuesto sobre la Renta más bien causó daños irreversibles a muchos agentes económicos, estimuló la evasión tributaria y provocó la desaparición de empresas por medio de fusiones y consolidaciones», expresó.

Consideró que la vigencia de esa disposición, que venció el 31 de diciembre del 2003, es una improductiva aberración.

«Su aplicación es responsable en gran medida del escaso crecimiento económico, la inestabilidad en las finanzas públicas, el aumento del desempleo, de la tasa de cambio, de la tasa de interés, de la inflación y de la evasión tributaria, contrario al fin perseguido», explicó.

Dijo que la razón radica en que esa modalidad de cobro alejó toda posibilidad de creación de nuevas empresas fuera de los parques de Zonas Francas Industriales y generó un alto nivel de evasión tanto del propio impuesto sobre la renta como del ITBIS y otros tributos.

Canahuate también advirtió que si el Congreso Nacional aprobara el proyecto de Ley de Reforma Tributaria en los términos sometidos a su consideración, «la presión tributaria de los honorarios profesionales alcanzaría: 10% de retenciones + 16% de ITBIS + 12 anticipos mensuales +… la sumatoria superaría, en muchos casos, el 40% de los ingresos brutos. Triplicando prácticamente la Presión Tributaria global».

Canahuate se opuso al aumento de la tasa del ITBIS del 12 por ciento al 16 por ciento y, en cambio, favoreció una ampliación de la base.

Explicó que «bajando la tasa y generalizando la base el consumidor paga menos y el Estado recauda más. Se ejerce un efectivo control cruzado que tiende a reducir la evasión. Los precios al consumidor en lugar de subir constantemente tienden a la estabilidad. El incremento en las recaudaciones se hace sostenible en el tiempo por vía de la transparencia!.

En cambio, dijo que si se aumenta la tasa y se mantienen las exenciones surgen aspectos de competencia desleal que motorizan la evasión. El contribuyente paga más y el Fisco recibe menos». «Eso fue exactamente lo que sucedió con la Reforma del año 2000. Hay que aprender la lección», expresó.

En cuanto a la reforma fiscal planteada, Canahuate dijo que «es necesario y conveniente no sólo proponer el incremento de los ingresos sino practicar una adecuada revisión de la calidad y magnitud del gasto público».

«La colectividad nacional reclama y espera que la Administración Pública destine los recursos que pagan los contribuyentes a satisfacer las necesidades públicas absolutas y relativas», expresó.

El nuevo libro de Canahuate, Vida y Tributo, contiene cuatro partes. Define la primera parte como testimonio de vida; la segunda parte es dedicada a su experiencia en la administración tributaria; la tercera parte aborda su ejercicio profesional liberal, y la cuarta parte la decida a sus publicaciones.

La primera edición de la obra, impresa en los talleres gráficos de Editora Corripio, es de 1,000 ejemplares.