Representantes de la industria de la leche y el queso se opusieron a que se grave la leche, por considerar que tendría consecuencias devastadoras sobre la alimentación de la población y serias consecuencias políticas para el gobierno que lo haga.

Al participar en el encuentro económico del periódico Hoy, Bayardo Mejía Arcalá, Julio Virgilio Brache, Diego Blanco Genao, Jhonny Straus y Pedro Evangelista Monegro afirmaron que el consumo de leche en el país se ha reducido últimamente en un 30 por ciento, y que la situación se agravaría si el producto es gravado con el ITBIS.

También plantearon que la producción de leche cruda ha decrecido en un 30 por ciento, como resultado de los altos costos de los insumos, como la soya y fertilizantes.

Advirtieron que el precio de una sola lata de leche ya representa el 20 por ciento del salario mínimo.

Bayardo Mejía afirmó que los impuestos a la leche importada son los más altos que se cobran en la República Dominicana, iguales a los carros o de las alfombras o lámparas de lujo, ya que se le aplica un 20 por ciento de arancel, más el 10 por ciento de la comisión cambiaria y el 2 por ciento del recargo cambiario a las importaciones.

Julio Brache, por su lado, advirtió que la aplicación del ITBIS a la leche tendría un efecto multiplicador sobre sus precios.

Explicó que el incremento sobre el precio final aumentaría en una mayor proporción que el ITBIS que la tasa del gravamen que se le aplicaría.

Dijo que en la mayoría de los países del mundo la leche no es gravada por ese impuesto al consumo, para no atentar contra la alimentación básica de la población.

Igualmente, Diego Blanco Genao explicó que el precio actual de una lata de leche en polvo de 2,500 gramos, que es actualmente de 560 pesos, se incrementaría entre 45 pesos y 90 pesos, dependiendo la tasa del ITBIS que se le aplicaría.

Consideró que la aplicación del ITBIS a la leche reduciría el consumo de ese vital alimento en un momento en que, según dijo, lo que se debe es estimularlo, ya que los dominicanos tienen un consumo per cápita anual de menos de la mitad del consumo promedio anual.

Explicó que antes de las autoridades aceptar una recomendación para que se le aplique el ITBIS a la leche deben ponderar que ese alimento no tiene sustituto en la dieta de los niños.

Igualmente, Jhonny Straus advirtió que se ha producida una drástica reducción en el consumo de quesos, y que la demanda bajarían aún más si se le aplica el ITBIS a la leche, ya que los aumentos en costos se traducirían en incrementos de precios.

Reveló que en los últimos seis meses han cerrado docenas de queserías a nivel nacional.

Los representantes del sector lechero también informaron que han desaparecido dos grandes plantas pasteurizadoras.