El Camaleón es un reptil que cambia de color cuando se siente amenazado y también lo hace ante los cambios de luz, temperatura, color y otras alteraciones del medio. Y si quieren identificar a un gran camaleón, que en su momento se vestía de naranja, verde y amarillo y que ahora se viste de morado, oigan esta historia.
Palabras de Danilo Medina el 17 de abril del 2007: citamos
Leonel Fernández, para contrarrestar el respaldo que tenemos en las bases del PLD, en las comunidades que visita ese mismo día, reparte furgones de comida, varilla y zinc. Me alegra que eso suceda porque los moradores de esas demarcaciones pueden comer por unos días gracias a su visita y la desesperación del gobierno por combatirme, pero no encuentra la forma de hacerlo. Nuestro equipo de campaña tiene filmados los furgones distribuyendo los alimentos así como otras formas burdas y descaradas de usar los recursos del Estado a favor del presidente Fernández. También usa los recursos públicos para ofrecerles contratos a sus adversarios internos y le financia los grandes eventos en hoteles para que los partidos aliados le den su apoyo a Leonel cierra la cita.
Un cuestionamiento de esta naturaleza, debería responder al perfil de un hombre integro y de firmes principios.
Y uno se pregunta ¿Cómo el candidato del PLD, Danilo Medina, puede ahora aceptar feliz y contento que su propio gobierno esté haciendo por él, lo que hizo por Leonel Fernández para derrotarlo hace 5 años?
¿Cómo ahora se atreve a negar desvergonzadamente que se estén usando masivamente los recursos públicos para apuntalar su campaña?
Solo en el mes de febrero el gobierno gastó RD$2,700 millones del presupuesto para financiar prensa y propaganda a favor de Danilo Medina.
Eso incluye, desde afiches, vallas, periódicos, redes sociales, radio y televisión, hasta una nómina de RD$350 millones para pagarles a periodistas y voceros de todo el país que lo defienden. Algunos de esos voceros no abren la boca por menos de RD$5.0 millones mensuales.
Un hombre que cambia en 180 grados su visión sobre el uso del poder para lograr sus objetivos, es un hombre que no tiene principios. Es alguien en quien no se puede confiar y que si tiene los medios a su alcance, traicionaría a sus mentores.
Esos mentores que lo derrotaron y que humillaron a su gente, desplazándola del gobierno y desconsiderándola.
Pero su deseo de venganza se ve fuertemente reprimido porque Medina está igualmente acorralado por el líder de su partido, Leonel Fernández, quien maneja a su antojo todos los hilos del poder y autoriza los recursos para su campaña. Es muy duro ser el candidato de un partido, pero no ser el líder.
Si Danilo fuera presidente, no podría mover una tecla sin ser autorizado por el líder o en su caso, por la esposa del líder, que rondará los pasillos del Palacio como el fantasma de la ópera. Tendrá en todo momento una espada de Damocles sobre su cabeza.
Sus discursos están llenos de fantasías que jamás cumplirá, porque los títeres no actúan por voluntad propia sino que se mueven por hilos que se manejan desde el lado oscuro del poder. Ese lado oscuro del peledeísmo corrupto, depredador y carente de moral.
Y el líder de ese lado oscuro volverá a reinar en 4 años para instaurar una dictadura constitucional y de partido que solo caerá con las turbulencias sociales de un pueblo hambriento y desesperado. Y el pueblo es el único que puede evitar esa catástrofe.