La temporada ya terminó para los Dodgers de Los Angeles y para Manny Ramírez, el extravagante toletero que logró la difícil tarea de adueñarse del corazón de la fanaticada de Los Angeles y se convirtió en la nueva superestrella de California.
En un período de dos meses, Ramírez bateó para .410, con 17 jonrones y 53 remolcadas y clasificó a los Dodgers a los playoffs.
Durante la postemporada, ligó para .520 y fue el único bate responsable frente a los Filis de Filadelfia.
Ahora, Ramírez será agente libre y el que quiera firmarlo deberá buscar por encima de los US$25 millones por temporada.
El toletero, mientras tanto, está listo para dejar que Scott Boras haga su trabajo de agente.
Fue una gran experiencia, dijo a la AP. En tono jocoso, añadió: Quiero ver quien hacer la mejor oferta. La gasolina subió, así que yo también.
Y de qué manera que subió ese precio del jardinero dominicano para la próxima temporada.