GINEBRA. Las negociaciones para buscar una solución política al conflicto sirio se reanudaron este lunes en Ginebra, donde el mediador de la ONU, Lakhdar Brahimi, recibió a la delegación de la oposición.

El domingo se había reunido con la delegación gubernamental, dirigida por el ministro de Exteriores sirio, Walid Muallem.

El objetivo de Brahimi es que todos se sienten en la misma mesa el martes. La oposición quiere presentar un informe sobre «la violencia del régimen» del presidente sirio Bashar al Asad, según una fuente opositora.

El informe afirma que desde el comienzo de las negociaciones en Ginebra, en enero, 1.805 sirios, murieron por el lanzamiento de 130 barriles de explosivos en Alepo y Daraya, en la región de Damasco.

De ellos 834 personas fallecieron en Alepo. Tras la primera ronda de las negociaciones de paz, Brahimi había reconocido que los resultados eran modestos y que el principal logro fue que los beligerantes, por primera vez en tres años de conflicto, se habían hablado y habían aceptado continuar haciéndolo.

Brahimi prometió un diálogo «más estructurado» para la segunda ronda, que comenzó este lunes y que en principio durará hasta el viernes, cuando los participantes decidan si siguen negociando.

Tras varios intentos de la ONU para obtener una «medida humanitaria de confianza», la oposición y el régimen acordaron en la primera semana de negociaciones socorrer a la población de la ciudad vieja de Homs, sitiada desde 2012.

Durante el pasado fin de semana más de 600 civiles pudieron ser evacuados a pesar de los disparos. Un equipo de la ONU y de la Media Luna Roja llevó a cabo esa operación el domingo, gracias a un alto el fuego de tres días decretado el viernes pero que fue violado el sábado. Otro grupo de civiles debe ser evacuado de los barrios rebeldes de Homs, indicó a la AFP un responsable de la Media Luna Roja Siria (CRS).

«Una reunión entre representantes de la ONU y el gobernador de Homs, Talal Barazi, tiene lugar en estos momentos. En principio, el alto el fuego fue prolongado y trataremos de sacar a los civiles lo antes posible», indicó ese responsable el lunes. También «se enviarán víveres. Normalmente, esas ayudas serán transportadas por los autobuses que entran a buscar a los civiles», agregó.