La reducción de los tipos de la Fed aseguran nuevos recortes de la tasa de política monetaria del BCRD.
La Reserva Federal dispuso ayer el primer recorte de tipos en cuatro años, bajando las tasas en 50 puntos básicos, que ahora quedan entre 5% y 4.50%.
Aunque con retraso para quienes piensan que el nuevo ciclo monetario en Estados Unidos debió producirse en julio y ante un mercado dominado por la expectación y la ansiedad (dividido entre quienes apostaban por un recorte de 25 puntos básicos y elevan la apuesta por 50 puntos básicos), la Reserva Federal dispuso ayer el primer recorte de tipos en cuatro años, bajando las tasas en 50 puntos básicos, dejándolas en un rango de entre 5% y 4.50%.
Este recorte de tasas había sido comprado por adelantado por el Banco Central de la República Dominicana, que previamente había bajado su tasa de política en 25 puntos básicos (de 7.00 % a 6.75 % anual), después de haber mantenido una pausa desde diciembre de 2023 para evitar que se ampliara mucha la brecha entre la tasa de política monetaria doméstica y la de la Reserva Federal. Se cuidaba de esta manera el Banco Central de que de que la inversión extranjera perdiera estímulos.
La magnitud del nuevo recorte de las tasas de la Fed, que el mercado espera que no sea el único, abre la puerta para que entren de nuevo los miembros de la de la autoridad monetaria dominicana a ocupar sus sillas a la mesa para disponer otras rebajas en la tasa de interés de política monetaria doméstica.
Pero ni la reducción de la tasa de política monetaria dispuesta en agosto ni las por venir tendrán un impacto inmediato sobre las tasas que cobran y pagan los bancos.
Esto ocurre con un rezago a través de lo que se conoce como el mecanismo de transmisión de la política monetaria.
Eso explica que no obstante haber pasado varias semanas del recorte de la tasa de política monetaria hecha por el Banco Central en su reunión de política monetaria de agosto, todavía no se ha traducido en una reducción de las tasas de interés activas y pasivas de los bancos, lo que se espera que comience ocurrir en octubre, aunque como hemos previsto, será una reducción suave y gradual, no acentuada.
Hay datos que aseguran que el impacto de la reducción de tasa de política monetaria del Banco Central todavía no se ha producido: la tasa de interés promedio ponderada para préstamos de los bancos múltiples en la semana del 13 al 17 de mayo era de 14.7% y durante la semana del 2 al 6 de septiembre se mantuvo en 15.4% y para la semana del 9 al 13 de septiembre subió ligeramente a 15.5%.
La reducción de tasas en 50 puntos básicos por parte de la Fed está en línea con los pronósticos de los operadores de Wall Street, que daban un 64% de probabilidades a dicha bajada.
Además, el ‘dot plot’, en el que los directivos de la Fed pronostican sus expectativas para los próximos meses, compromete dos recortes más para este año, pronosticando otras dos reuniones de recortes de aquí a diciembre.
Los últimos datos económicos y el enfriamiento del mercado laboral han empujado a la Fed a aplicar el significativo recorte en sus tipos.