La profunda devaluación del peso frente al dólar norteamericano y la inflación que le ha seguido han reducido a la mitad la capacidad de compra del salario mínimo de los empleados públicos y privados del país.
Las informaciones estadísticas contenidas en la propuesta de reforma fiscal elaborada para el gobierno por el polémico economista Andy Dauhajre expresan este deterioro, así como el último informe semanal de la Oficina de Desarrollo Humano, adscrita al capítulo del PNUD en el país.
Los datos contenidos en la propuesta tributaria de Dauhajre indican que, medido en pesos de 1980, el salario real de los empleados públicos han caído de 300 pesos mensuales en los años 2001 y 2002 a poco más de 150 pesos a mayo de este año.
El estudio también muestra que, medido en su equivalente en dólares, el salario promedio base de los maestros de educación básica Blo correspondiente a una tanda de clases- bajó de 135 dólares en el 2002 a 82 dólares a mayo de este año. La caída fue de un 39%.
Con el mismo razonamiento, el presidente de la Fundación Economía y Desarrollo indica que el salario promedio de los médicos disminuyó de 646 dólares por mes en el 2002 hasta 337 dólares a mayo de este año. La caída fue del 48%.
En general, el estudio de Dauhjare muestra que el salario mínimo medido en dólares de los empleados de la administración pública se ha reducido en más de un 50% entre marzo del 2000 (US$92.25) y marzo de este año (US$40.61)
El asesor presidencial es partidario de un aumento general de salario.
[b]DESARROLLO HUMANO[/b]
Por su lado, la Oficina de Desarrollo Humano divulgó en su último informe semana que el salario mínimo legal en las grandes empresas dominicana equivalía en mayo de este año a 103 dólares. En enero del 2002 era de 197 dólares. La diferencia es del 48%.
Para las pequeñas empresas, el salario mínimo era de 63 dólares a mayo de este año. En enero del 2002 era de 120 dólares. La disminución es del 47%.
Y en cuanto al salario mínimo en las zonas francas industriales, la devaluación del peso lo redujo a 74 dólares a mayo de este año. En enero del 2002 era de 145. Perdió el 49% de su poder de compra.
Las grandes empresas son aquellas que tienen un capital mayor de 500 mil pesos. Las pequeñas tienen un capital por debajo de los 200 mil pesos.
En los últimos días se ha levantado un movimiento de opinión pública a favor de una revisión salarial. Este movimiento ha sido apoyado por las principales centrales sindicales, por dirigentes empresariales, por economistas independientes, por sectores de la iglesia católica y por los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados.
Las diferencias entre distintos sectores están, sin embargo, en el alcance del aumento y en la proporción del mismo. Los empresarios han dejado claro, a través de sus organizaciones y dirigentes, que el alza debe ser al salario mínimo solamente.
Los economistas que han opinado y las centrales sindicales creen, por su parte, que el aumento de salarios de abarcar a todos los empleados de los sectores público y privado.
Los empresarios han llamado la atención sobre un alza salarial que debilite más todavía las empresas y que constituya un estímulo para que la inflación siga creciendo, en tanto que los gremialistas consideran que un aumento general daría más capacidad de compra a los trabajadores y empleados y, en consecuencia, ayudaría a superar la recesión que afecta al aparato productivo del país.