WASHINGTON, (AFP) – Las Naciones Unidas y el Banco Mundial (BM) se comprometieron ayer junto a los países en desarrollo a recuperar los fondos fraudulentamente adquiridos por sus ex gobernantes.
Unos 40.000 millones de dólares son saqueados cada año en los países más pobres del planeta, a menudo por personas que figuran en los más altos niveles del Estado, dijeron la ONU y el BM en el lanzamiento de su «Iniciativa para la Recuperación de los Activos Robados» (Star por sus siglas en inglés).
«Esta iniciativa favorecerá la muy necesaria cooperación entre países desarrollados y países en desarrollo, entre el sector público y el privado, para que los activos robados vuelvan a sus legítimos propietarios», indicó el secretario general de la ONU, Ban ki-Moon.
«No debe haber santuarios para los que roban a los pobres», agregó el nuevo presidente del BM. Esta iniciativa es, según él, una advertencia a los dirigentes corruptos.