POR DIONISIO SOLDEVILA
Los Tigres del Licey necesitan desesperadamente un bate para fortalecer esa ofensiva que luce débil y en cierta forma anémica. Y para ello contaban con la esperanza de que el jardinero José Guillén se integrara al conjunto, como había él mismo comentado.

Pero aparentemente el nuevo conjunto de Guillén en el béisbol de las Grandes Ligas, los Marineros de Seattle, tenían otros planes para el jugador que se encuentra en un proceso de recuperación de una operación de transplante de ligamento en el codo derecho.

«Seattle no quiere que Guillén juegue. El quiere jugar, pero está esperando que le den el permiso. Hasta que no los convenza no podemos hacer nada al respecto», dijo el asistente del gerente de los Tigres, Francisco Busto.

Pero el Licey está satisfecho con el material que tienen en su nómina, principalmente por la llegada del jardinero estadounidense Matt Kemp, escogido en el draft de refuerzos el pasado sábado.

«Con Matt Kemp en la alineación, la cola del Licey cambia radicalmente y tenemos más profundidad», dijo Busto.

BUSCAN UN LANZADOR

En la actualidad, los Tigres se encuentran negociando con un lanzador extranjero para unirse al conjunto, ya sea en la rotación o en el bullpen.

«Estamos tratando de confirmar un pitcher refuerzo, pero todavía no podemos ofrecer nombres porque no hemos firmado a nadie y tú sabes cómo son las cosas», añadió Busto.

Busto señaló que podrían usar ese lanzador «como abridor o relevista», pero aparentemente están más inclinados hacia el relevo.

«Ya el fin de semana Ramón Ortiz va a lanzar bullpen», dijo Busto, aparentemente motivado de que Ortiz se integre a la rotación en la segunda semana del round robin.