POR MANUEL JIMÉNEZ
El secretario de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Temístocles Montás, dijo ayer que el país debe cuidar la estabilidad y el crecimiento que ha alcanzado, pues la experiencia muestra que las crisis económicas pueden echar por la borda los esfuerzos de años y, además, sus efectos negativos toman tiempo para ser revertidos.

Citó a título de ejemplo la crisis  bancaria que se desencadenó en el país en el año 2003 y que, según afirma, incrementó la pobreza crítica de un 11.1%  de la población, en octubre del 2002, a un 16.2%  en octubre del 2004.

Sin embargo,  Montás destacó que la política de estabilización y recuperación del crecimiento económico llevada a cabo por el presente gobierno ha permitido reducir la pobreza crítica a un nivel de un 13.2%.

Montás presentó una exposición sobre “El Tema del Hambre en la Agenda del País” en el marco de un seminario celebrado el martes en el Palacio Nacional sobre “Impacto Económico y Social de la Desnutrición Infantil en la República Dominicana”.

En el evento, Rodrigo Martínez, director de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), con sede en Santiago de Chile, rindió los resultados de un estudio en el que República Dominicana aparece como uno de los países de la región con menor prevalencia de desnutrición global.

Montás dijo que en efecto, República Dominicana y Costa Rica presentan las más bajas prevalencias global de desnutrición y enfermedades asociadas entre los países de Centroamérica. La prevalezca en Costa Rica es de 4.0%, en tanto que en República Dominicana alcanza el 5.3%, seguida de Panamá (6.8%), Nicaragua (9.6%), El Salvador (10.3%), Honduras (16.6%) y Guatemala (22.7%).

“El reconocimiento de la relación entre pobreza y desnutrición y entre crisis económica y pobreza pone de manifiesto la importancia de la estabilidad y el crecimiento económico, como herramientas de importancia capital en la lucha para reducir la pobreza y la pobreza crónica, dijo Montás.

En este orden, el funcionario sostuvo que el presente gobierno ha centrado sus políticas sociales en esfuerzos destinados a erradicar los niveles de pobreza y desnutrición que afectan a grandes segmentos de la población en base a una estrategia de desarrollo que asegura la inclusión social y el sentido de pertenencia a la sociedad.

Dijo que el primer pilar en el marco de esta estrategia son las políticas macroeconómicas orientadas a potenciar el crecimiento y minimizar su votalidad en un contexto no inflacionario, así como la aplicación de políticas orientadas a elevar y racionalizar el gasto social como forma de atacar el círculo vicioso de la pobreza, la desnutrición,  la vulnerabilidad y baja acumulación de capital humano.

Otra parte importante en esta estrategia  es el aumento del financiamiento a los programas de salud colectiva, declarados prioritarios en el Presupuesto Nacional, en los que se incluyen los proyectos de salud materno-infantil, de inmunizaciones, nutrición y combate a las enfermedades transmisibles, entre otros, argumentó Montás.

En el seminario intervinieron también otros expertos latinoamericanos en materia de políticas económicas y sociales, entre ellos, Luis Maira, de Chile y Pedro Medrano, director Regional para América Latina y el Caribe del Programa Mundial de Alimentos (PMA), de Naciones Unidas.

En su exposición,  Montás destacó que al llegar al poder en agosto del 2004, la administración del Presidente Leonel Fernández encontró un nivel de gasto social ascendente a 7.5%  del PIB, pero dos años más tarde ese nivel ascendió a 9.2%, pese a un programa de ajuste con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Dijo que este incremento en el gasto social ha estado acompañado por el surgimiento y fortalecimiento de programas sociales orientados a atender la población más vulnerable, destacando entre estos a los programas “Comer es Primero” que hoy cubre a más de 200,000 hogares en todo el país recibiendo una asistencia mensual de RD$500 para comprar alimentos. Mencionó también los programas de Incentivo a la Asistencia Escolar que transfiere recursos a hogares muy pobres con el compromiso de que los niños y niñas vayan a la escuela.

Pero dijo que sólo en el 2006, el gobierno destinó a programas directos de alimentación una suma superior a los RD$5,000 millones a través del desayuno escolar, el plan social de la Presidencia, Comer es Primero, y los Comedores Económicos.