Diego Pesqueira
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El secretario de Cultura, José Rafael Lantigua, afirmó anoche que al entregar el Premio Nacional de Literatura a Bruno Rosario Candelier se reconoce su obra realizada hasta la fecha y la que falta por hacer.
El de esta noche es un verdadero homenaje nacional a un escritor noble, plural, de significativos aportes a nuestro desarrollo literario, y a un coherente gestor cultural que desde hace cuatro decenios ha entendido el oficio literario como una herramienta de servicio al país y a su mejoramiento social, moral y humano, precisó.
Dijo que al entregar el premio, la secretaría de Cultura, junto a la Fundación Corripio, reverencia y exalta la obra de vida de este entrañable amigo, compueblano y maestro.
Resaltó, además, las cualidades de educador de Rosario Candelier, quien lleva más de 40 años de ejercicio.
Sostuvo que el galardonado se ha constituido en un auténtico apostolado literario, en un evangelizador de la literatura que recorre el país constantemente manteniendo la vigencia de sus metas y de sus premisas. Sólo Domingo Moreno Jimenes, aunque en función solitaria, ha ejercido en el país un apostolado literario similar, con la diferencia de que Rosario Candelier ha dejado sentado grupos activos que pregonan el ideal interiorista y que se nutren de la savia fecunda de sus enseñanzas y directrices.
Lantigua expresó las felicitaciones en nombre del presidente Leonel Fernández, por el lauro que ha obtenido por sus múltiples méritos.