Secretos citadinos «a la vuelta de la esquina»

<P><STRONG>Secretos citadinos «a la vuelta de la esquina»</STRONG></P>

A pesar de que fue fundada en el año 1496, todavía la ciudad de Santo Domingo tiene lugares poco conocidos o explorados, tanto por sus habitantes, como por los visitantes. 

A continuación compartimos contigo algunos «secretos» citadinos.

 1. Parque Cachón de la Rubia, maravilloso santuario rico en recursos naturales. Si has decidido hacer turismo interno te invito a que te des una vuelta junto a tu familia o tus amigos por el Parque Mirador Manantiales del Cachón.

Este parque urbano es catalogado como una reserva natural por su biodiversidad y por los manantiales que se forman en el.

 El ambientalista Eleuterio Martínez explica que el Cachón de la Rubia constituye el único pulmón natural de Santo Domingo Este.

“En el nacen más de 45 manantiales de agua cristalina, se encuentran unas 423 especies de plantas, además una diversidad de aves que no son de aquí así como endémicas, que son disfrutadas por cientos de familias”, dice.

Esta reserva en medio de la ciudad tiene una superficie de 1.9 kilómetros cuadrados, ubicada sobre el río Ozama, en la zona noreste de la ciudad de Santo Domingo.

Origen del nombre.  De acuerdo a una versión, el nombre del parque se debe a que a principios del siglo XX había en el lugar un trapiche rudimentario que abastecía de melaza y azúcar a la ciudad. La “rubia” era la esposa del dueño, quien se hizo famosa en el lugar por sus dotes de administradora del ingenio. Lo de «cachón» porque un chorro o cachón de agua pura y cristalina alimenta el río Ozama.

El Cachón de la Rubia es un área protegida visitada por decenas de aficionados de la fotografía, observadores y estudiosos de las aves como las gallaretas, pico rojo, yaguazas, zaramagullones, rey congo y cuacuá, además águilas solitarias, garzones reales, carraos, coco prieto y más de 60 especies de aves tanto acuáticas como migratorias que visitan la zona para reproducirse.

VIDEO: Cachón de la Rubia,santuario rico en recursos naturales

 

La flora, que forma parte natural del ecosistema del área, está formada por cocoteros, ceibas, mangles, enea e hicacos, entre otras especies, además de javillas, samanes y campeches. La vegetación de la zona también está formada por arbustos como palo de hueso, corazón de paloma, cabirma, almácigos y palmas Reales.

El Cachón de la Rubia es el principal parque urbano municipal, recreativo, ecológico, científico, acuático y pulmón productor de oxígeno de una buena parte de Santo Domingo.Ven a darte un chapuzón en sus aguas y disfruta de la armonía y la paz que transmite su medio ambiente. ¡No esperes que te cuenten!

2. El parque “Los Tres Ojos”, mucho más que cavernas. Aunque algunos ya han tenido el placer de visitarlo, todavía hay quienes no. Es importante que los segundos sepan que en este lugar hay cuatro lagos de aguas azufradas, tres de los cuales están dentro de una gran caverna.

El parque “Los Tres Ojos” es perfecto para una dinámica y divertida excursión. Ubicado en la Zona Oriental, a pocos minutos del centro de la ciudad, nos pone en contacto con una belleza natural envidiable.

Se trata de un mundo de lagos subterráneos acompañados de cuevas donde se refugian especies como los murciélagos y helechos que miden hasta cuatro metros de altura.

Su nombre hace honor a sus tres lagos subterráneos principales. Lo preservó aunque después de dársele nombre y apertura al parque, un cuarto lago con mayor profundidad fue descubierto, pero este no fue considerado como «un ojo» porque se encuentra al aire libre.

Lo importante es que puedes disfrutar de los lagos navegando en pequeños botes que el parque pone a disposición de los visitantes. El acceso a las cavernas es fácil para el público.

Un dato curioso es que en este lugar se han realizado varios rodajes de la serie de Tarzán, el hombre mono.

3. Las Ruinas del Palacio de Engombe, un tesoro escondido cerca de ti. En mis años viviendo en el municipio Santo Domingo Oeste nunca pensé que existiera una reserva histórica escondida en un lugar poco conocido por la población dominicana: el sector de Engombe.

La conocí en un recorrido, de esos a los que uno no quiere ir, gracias a un amigo que me llevó a una comunidad llamada “Palacio de Engombe”. Me quedé estupefacto al ver este lugar, ya que estaba ajeno a que a tan solo unos 20 minutos de mi domicilio existiera una zona cargada de tanta expresión cultural.

Les cuento que en Las Ruinas del Palacio de Engombe se encuentra ubicado el Ingenio de Santa Ana, situado a 500 metros del peaje de la autopista 6 de Noviembre que conduce desde la ciudad de Santo Domingo hacia la provincia San Cristóbal y está limitada por las caudalosas aguas del río Haina.

En este hermoso sitio las familias que saben de él se anidan buscando tener un contacto con su riqueza natural y sus estructuras coloniales. La demarcación forma parte del Cinturón Verde de la Provincia Santo Domingo y el Distrito Nacional.

Dentro de sus aportes se puede señalar la protección de los cursos de agua del río Haina, la conservación de humedales, los bosques y el hábitat especial que sirven de refugio a las aves acuáticas migratorias y a otras especies de gran valor.

 

VIDEO: Ruinas del Palacio de Engombe, un tesoro citadino

 

El antiguo Palacio de Engombe es una estructura colonial del siglo XVI, cuando se fundó el ingenio Santa Ana. Su nombre se asocia a la voz africana que denomina /n-gombe/ al ganado o a los bueyes. 

Sin lugar a dudas, esta parte constituye la reserva histórica más importante de la comunidad, debido al conjunto de edificaciones que posee, formada por cuatro estructuras básicas, que son: la Casona o Palacio, la Iglesia, el Galpón o Almacén, que se usaba para esclavos, y al fondo el Trapiche. 

El palacio es de dos niveles y aún conserva su estilo señorial. Perdió sus escaleras pero presrva su aire galán, que demuestra el modo de vida característica de la época colonial. 

Yo ya tuve la experiencia de visitar el Parque Ecológico Ruinas de Engombe, un lugar de abundante recursos naturales, no esperes que te cuenten y frecuéntalo también.

4. Los Congos de Villa Mella, herencia africana en República Dominicana. La Cofradía del Espíritu Santo de los Congos de Villa Mella constituye una de las expresiones socioculturales de mayor trascendencia para la República Dominicana, rica en costumbres y tradiciones que los esclavos africanos llevaron al Nuevo Mundo, en especial a esta isla.

La importancia de la cofradía fue reconocida el 18 de mayo de 2001, cuando la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (UNESCO) la declaró “Patrimonio oral e intangible de la Humanidad”.

La función principal de la cofradía, inicialmente presidida por los fenecidos Sixto Minier y Pío Brazobán, ahora por sus descendientes, es celebrar las fiestas de la Virgen del Rosario y del Espíritu Santo así como la realización de las ceremonias funerarias de los difuntos que de una u otra forma están ligados a la tradición de los Congos.

VIDEO: Los Congos de Villa Mella, Patrimonio de la Humanidad

 

Este último rito se ejecuta al noveno día del fallecimiento, también cuando se cumple un año de la defunción, en lo que se denomina “cabo de año”, y a los tres, cinco o siete años del deceso (tiene que ser número impar), conmemoración conocida como “banco”. En la celebración del “cabo de año”, los deudos levantan un túmulo decorado con papeles de color morado y blanco en el que se coloca la foto del difunto.

En tanto que las celebraciones del “banco” incluyen la quema del altar y la ejecución de los “toques de la viuda”, que sólo bailan los dolientes, algunos de ellos en un estado que definen como de “posesión” por el fallecido.

Tomando ron y fumando tabaco, los Congos se reúnen para producir un interminable ritmo sacado de tambores, maracas y la canoíta -un instrumento a base de madera con mango y hendiduras en su centro- mientras hombres y mujeres contornean sus cuerpos sudorosos en una eufórica danza libre.

Tradición.  De acuerdo a la tradición, el Espíritu Santo entregó los instrumentos a los primeros congueros al inicio de la colonización en un lugar que hoy se conoce como Villa Mella, principal conglomerado del municipio Santo Domingo Norte, contiguo a la capital dominicana.

Características musicales. Los congos de Villa Mella presentan una fuerte influencia africana, especialmente del antiguo Dahomey y de la región congoangoleña.

Se conoce que también existieron congueros en sectores aledaños como Los Mina, Mendoza y Mandinga, entre otros.

Los Congos son mucho más que baile y cantos, son  una expresión sobre la vida, la muerte, la sociedad, la naturaleza, que nos enseña a ver la vida de una manera colectiva.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas