POR MARIO MENDEZ
El sector eléctrico se ha convertido en principal responsable del endeudamiento externo en los últimos años. Las deudas concertadas para financiar al sector eléctrico vienen desde los bonos soberanos, parte de cuyos recursos fueron destinados a pagar deudas con generadores, pasando por los préstamos del BID y el Banco Mundial, en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional; siguiendo con el endeudamiento derivado de compra de las distribuidoras Edenorte y Edesur a Unión Fenosa, hasta llegar a la línea de crédito de 65 millones de dólares contratada por el nuevo gobierno del presidente Leonel Fernández desde antes asumir el poder.

Parte de los primera emisión de 500 millones de dólares de bonos soberanos fue destinada al sector eléctrico, y la última emisión de 600 millones de dólares fue utilizada principalmente para el pago de deudas internas resultantes de líneas de crédito utilizadas por el gobierno para pagar deudas a las empresas distribuidoras y generadoras.

Adicionalmente, el sector eléctrico ha recibido desembolsos parciales de dos préstamos del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por unos 300 millones de dólares.

Con la compra de Edenorte y Edesur el Estado se endeudó en alrededor de 400 millones de dólares.

Ante la gravedad de la crisis en el suministro de energía eléctrico, el nuevo gobierno se vio obligado a utilizar su primera operación financiera de crédito externo de corto plazo, para financiar la compra de combustibles en el sector eléctrico.

El secretario técnico de la Presidencia, ingeniero Temístocles Montás, justificó la línea de crédito en el hecho de que «si no se actuaba rápidamente se iba a llegar al 16 de agosto con todas las plantas apagadas, porque no tenían combustible».

Ante esa situación, en círculos económicos del país se plantea que este sector se ha convertido en un barril sin fondo.

El presidente Leonel Fernández anunció medidas para enfrentar problemas estructurales del sector eléctrico, y lo que muchos esperan es que las medidas anunciadas contribuyan a cortar ese proceso de acelerado endeudamiento externo a que el sector eléctrico está empujando al país.

El gobierno ha anunciado planes para reestructurar la deuda externa, dadas las limitaciones financieras del país para cumplir con sus compromisos internacionales.

En su discurso de toma de posesión, el presidente Fernández cuestionó el alto nivel de endeudamiento concertado en el gobierno anterior, que elevó la deuda externa a unos 7,000 millones de dólares.

Para enfrentar la carga financiera que representa ese nivel de endeudamiento externo, el presidente Fernández anunció que su gobierno reestructurará la deuda externa.

Hay quienes plantean que también debe ser reestructuración de deuda de corto plazo con las empresas eléctricas.