Los sectores de Santo Domingo Este en los cuales la alcaldía asumió el servicio de la recolección de los residuos sólidos lucían ayer limpios, mientras que en otros donde es asumido por las compañías recolectoras se observaron focos de pequeños vertederos.
En la circunscripción número 2, donde están ubicados barrios como Los Mina, Tres Brazos, Cansino, Moisés, Las Frutas y otros, fueron asumidos por la Alcaldía de SDE, hace dos semanas, debido a la precariedad en la recolección, por lo que se nota un cambio significativo.
Mediante recorrido no se observaron los grandes basureros en sectores como los señalados, así como en Katanga, Puerto Rico, Vietnam, Juan Pablo Segundo y otros que pertenecen a la Circunscripción 2 de SDE.
En otros como Villa Duarte, Mameyes, El Pensador, Isabelita, en los alrededores del Faro a Colón, ayer había menos residuos sólidos en los espacios públicos, pero se observaron focos de pequeños vertederos en avenidas como La España, El Pensador e Iberoamericana.
Estas avenidas han sido tomadas como vertederos por quienes habitan detrás del llamado Muro de La Vergüenza, construido en la gestión del entonces presidente Joaquín Balaguer para tapar la miseria de quienes vendrían a la inauguración del monumento Faro a Colón a propósito de los 500 años de la llegada de los españoles a la isla.
El alcalde de SDE, Manuel Jiménez, ha dicho que no ha resuelto el problema de la recolección de los residuos sólidos en ese municipio porque se encuentra atado a los contratos que encontró y el Concejo de Regidores se ha resistido a declarar el municipio en estado de urgencia.
Afirma que cuando se trabaja con transparencia se choca con muchos obstáculos que hay que romper, al tiempo que invitó a imitar el ideario del patricio Juan Pablo Duarte en ese sentido.
Advirtió que si el ASDE demuestra un buen trabajo en la Circunscripción 2 por qué no hacerlo en las demás, ya que es el ayuntamiento quien debe hacer esa labor.
Deplora que se haya hecho una práctica que los gobiernos locales hayan cedido una función tan fundamental como la recolección de basura.
Confía en que para el 24 de abril, cuando su gestión cumple el primer año, el municipio esté limpio, ya que se encuentra en un proceso de licitación bajo la asesoría del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Explicó que se asesora de que todos los procedimientos que desarrolle la alcaldía gocen, no solamente de la legalidad, sino además de la transparencia para beneficio de los munícipes y del gobierno local.
Lamenta que el Concejo de Regidores tenga en su poder dos proyectos actualmente: uno el pliego de condiciones de licitaciones que les fue depositado por los técnicos del PNUD, así como otro sobre la declaratoria de urgencia del municipio.
El tema de rescindir los contratos con las compañías recolectoras de basura enfrenta al alcalde Jiménez con los regidores, a tal punto que estos últimos no han conocido dos proyectos sometidos por el primero, uno sobre los requisitos mínimos para contratos con el cabildo y otro sobre la declaratoria de urgencia del municipio.