Washington. La asesora de la Casa Blanca Kellyanne Conway admitió que ella no tiene evidencia alguna que respalde las aseveraciones del presidente Donald Trump de que el gobierno de Barack Obama intervino las líneas telefónicas del entonces candidato republicano durante la campaña.
Sin embargo, Conway mencionó que hay otras técnicas con las cuales un gobierno puede espiar a sus ciudadanos, una respuesta que difícilmente apaciguará las críticas hacia las denuncias de Trump hechas por Twitter de que los teléfonos en su rascacielos Trump Tower estaban intervenidos.
La Comisión de Asuntos de Inteligencia de la Cámara de Representantes le ha pedido a Casa Blanca que facilite pruebas de sus acusaciones para el lunes.
“La respuesta es que no tengo evidencia alguna y estoy muy satisfecha de que la comisión de inteligencia de la cámara está investigando”, dijo Conway al programa “Good Morning America” de la televisora ABC.
Luego ella tuiteó el lunes que el gobierno de Trump está “complacido” por las investigaciones en el Congreso y “habrá comentarios después”.
Muchos políticos han criticado con dureza al presidente por lanzar unas acusaciones de tal severidad mediante su cuenta de Twitter y sin dar pruebas. Grabarle las conversaciones telefónicas a un ciudadano en Estados Unidos requeriría la aprobación de un tribunal y como presidente, Trump tendría la potestad de publicar esa información.
James Clapper, quien fue director de inteligencia nacional bajo la presidencia de Obama, ha rechazado contundentemente las acusaciones de Trump.