SEGUNDO SEXO. Conociéndome a mí misma

SEGUNDO SEXO. Conociéndome a mí misma

¡Ah, aprender! Nunca antes había entendido tan clara, explícita y maravillosamente el proceso de crecer a través de lo que aprendo.

Hasta mí llega un blog en el que encuentro informaciones valiosísimas sobre el significado de ser mujer y cómo entrar en conexión directa con mi forma de pensar, de sentir y de actuar a partir de la feminidad expresada en mi cuerpo.

En Conciencia sobre mi cuerpo de mujer, un curso a cargo de Mónica Felipe Larralde, se establece un vínculo indisoluble entre mis justificaciones internas sobre mi condición femenina y mi útero.

La manera y razones como decido mi accionar están estrechamente vinculadas con la relación que tengo con mi cuerpo, partiendo desde mi útero, que es el órgano que dirige los procesos hormonales.

La autora señala que, a partir de esta experiencia de vincular mi cuerpo con mi energía vital, me sentiré mejor en mi propio espacio físico, viviré la vida más plenamente, podré sanar antiguas heridas, aprovecharé al máximo mi potencial, descubriré mis dones, estaré en paz conmigo misma y con los demás y lograré la meta de todo ser humano: ser feliz.

El curso está dirigido a toda clase de mujeres creciendo en todo ámbito: terapeutas, maestras, emprendedoras, creativas, abuelas…, pero llama poderosamente mi atención el que también busca a mujeres interesadas en reconectar con su esencia de mujer, necesitadas de volver a ellas mismas y para las que quieren disfrutar a plenitud su condición femenina.

El curso se apropia de herramientas ancestrales poderosas que están vigentes aun en otras culturas, pero que muchas veces han sido vedadas para muchas mujeres y puestas al servicio solo de una élite.

Desde el momento en que se inicia el proceso cultural de la niña, se le prohíbe tácitamente el uso de su cuerpo como herramienta de autoconocimiento, separándolo de manera drástica del resto de nuestros campos energéticos y esto es parte de lo que busca este curso: reconectar nuestro cuerpo físico con el resto de las entidades que me conforman como un todo: mi energía, mi psiquis, y mi espiritualidad

¿Puede existir un viaje más excitante que el que se produce hacia el interior de uno mismo? Si vivir es la experiencia más placentera, vivir desde una misma es ¡alcanzar la conciencia plena de mi ser!

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas