Hoy 
POR FIOR GIL
El vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), dijo ayer que sería conveniente que el Congreso apruebe, lo más pronto posible, la reforma a la ley General de Electricidad a fin de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) pueda conocer la carta de intención de la séptima revisión del acuerdo stand-by.
Radhamés Segura, dijo que de no aprobarse la ley el país tendrá que pedir una dispensa al FMI porque la penalización al fraude eléctrico, que se establece en la reforma a la Ley General de Electricidad (125-01), es uno de los puntos que exige el organismo internacional para la aprobación de la carta de intención de esta séptima ronda de negociaciones.
Sin embargo, dijo estar seguro que los diputados aprobarán la Ley y recordó que hay un compromiso con el FMI. Yo diría que en caso de que la aprobación no sea posible le pediríamos una dispensa al FMI, agregó.
El vicepresidente de la CDEEE reafirmó que para el país es conveniente que no haya dilación en que el FMI conozca la revisión de la carta de intención, ya que estamos viviendo en un período de una gran estabilidad macro económica.
No queremos producir -dijo- ninguna acción que pueda perturbar o causar preocupación, con la situación del país con una dilación en el conocimiento de esta carta de intención y por eso es la urgencia en que se apruebe la ley, sostuvo Segura.
En la rueda de prensa Segura estuvo acompañado de los miembros del consejo directivo de la distribuidora del Norte y su gerente general Manuel Suárez, quienes salieron al frente a una denuncia que da cuenta de irregularidades financieras en esa empresa.
En otro orden el vicepresidente de la CDEEE informó que en la agenda tratada con el presidente Leonel Fernández, en la reunión del domingo pasado, se incluyeron el tema de los clientes no regulados de la empresas distribuidoras y la penalización del robo de electricidad.
Afirmó que de acuerdo con la ley vigente los clientes que tienen un consumo por encima de 200 kilovatios/hora califican para usuarios no regulados y nosotros lo que hemos planteados es que hay más de 200 cliente de ese tipo en las empresas distribuidoras y que tienen un consumo de RD$476 millones mensuales.
