En las últimas 24 horas, 53 personas han acudido al hospital de Tamboril con síntomas de cólera. Ayer, había seis internados afectados por la enfermedad, revela un informe dado a conocer por el Ministerio de Salud Pública. Consigna que de los seis hay tres niños y tres adultos, todos fuera de peligro. Tres están en plan de rehidratación oral.
Salud Pública indicó que una investigación sobre los casos sospechosos en el hospital Armando Ico Martínez de Tamboril, que dirige el doctor Eduardo Cordero, arrojó que del día primero a la fecha en ese centro asistencial han sido vistos 399 afectados por vómitos, diarrea y, en algunos casos, fiebre.
De esa cantidad, 82 han ameritado ingreso, y del resto se espera el resultado de la prueba.
Dice que jueves, viernes y sábado fueron atendidas con iguales síntomas 120 personas, y en las últimas 24 horas se vieron 53.
Médicos y medicinas. Para la atención exclusiva de estos casos, el hospital de Tamboril cuenta con un personal médico que incluye pediatras, internistas y gastroenterólogos, que trabajan horas extras.
También dispone de los medicamentos necesarios, como son sueros de hidratación oral e intravenosa, antibióticos, y otros, según Salud Pública.
Para evitar el contagio y la propagación del cólera, se habilitó una emergencia solo para atender a las personas sospechosas de padecer la enfermedad.
Se informó que desde abril hay instaladas unidades ambulatorias de hidratación en los sectores donde se registran más casos.
Estas unidades funcionan en locales facilitados por la comunidad, están provistos de tinacos para agua que suple diariamente la empresa Coraasan.
Las claves
1. Agua potable
Ayer, la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago desmintió que suspendiera el suministro de agua potable.
2. Seguimiento
La Dirección de Comunicación de Salud Pública informó que el ministro, doctor Freddy Hidalgo, da seguimiento a la situación de Tamboril desde el momento mismo en que fue posesionado en el cargo, a través de contactos con el director del hospital de allí y del Cabral y Báez. Se imparte educación preventiva y se enseña a los comunitarios a usar los sueros de hidratación oral.