Sé poco sobre agua, aunque en mi pueblo llovía como en Macondo y tras vaguadas de semanas, el Jaya deshacía las alambradas, borraba cercas y solares, y podíamos marotear libremente. Durante las sequías se prendían velas a las ánimas del Purgatorio, como en el relato de Bosch “Dos Pesos de Agua”. Del costo del agua sé  apenas que en este país hay que pagarla muchas veces: al acueducto por instalarla y servirla, a la CDEEE para mover la bomba, a la ferretería y al plomero, al constructor  y al limpiador de cisternas; al distribuidor de gas (para hervirla),  al proveedor de filtros, a la tienda de electrodomésticos y a los técnicos, y aún comprarla en galones para evitar epidemias.

Con todo lo cual, por lo menos se aprende algo acerca del agua potable. Respecto a acueductos, he visto a los serranos improvisarlos armando tuberías desde los manantiales, y a buzos japoneses colocarles pesas a los tubos submarinos del acueducto de Cayo Levantado. Y no acaba de cuadrarme, al menos de primera impresión, la noticia difundida en los diarios, el viernes 12 de noviembre, según la cual, la construcción de sendos acueductos, para la ciudad de Samaná y para Los Algarrobos (no incluye a Sánchez,  Las Terrenas ni otras poblaciones); y la rehabilitación del depósito regulador de El Catey; costarán unos ciento treinta mil pesos, (RD$ 130,000.00) por hogar.

Que resulta de dividir el costo total de RD$ 5,799,000,000 entre las 187,725 personas beneficiarias, según la noticia. Lo que equivale a unos 41,717 hogares. Cosa extraña, porque la Oficina Nacional del Censo registró solamente 24,011 hogares en toda la provincia en el 2002 y estimó un crecimiento negativo de dicha población en los años siguientes. Así resulta que darle agua a cada familia costó a los contribuyentes RD$129,743.00 por hogar, o muchísimo más si, como dice la ONE, los hogares beneficiados son muchísimo menos.

Hogares (2002):

Santa  Bárbara de Samaná                 13,089 

Sánchez                                                6,974 

Las Terrenas                                         3,948 

Total:                                                  24,011.

Expertos consultados sobre este aparente enigma, explicaron que el costo de construir un acueducto nuevo anda unos veinte y siete mil, setecientos cincuenta pesos dominicanos (RD$27,750.00) por vivienda,  difícilmente por encima de los RD$ 37,000.00.

Por tanto, sería conveniente que se produjera una mayor aclaración sobre esta importante inversión pública. Esta petición no aspira ser denuncia, porque para ello se requiere que haya una autoridad con capacidad y voluntad de sancionar, lo cual no ocurre respecto a obras estatales. Se trata de una solitaria petición de contribuyente, a propósito de presagios sobre alza de impuestos. También podría interesarle a alguna entidad pública o ciudadana.