El Senado aprobó ayer en segunda sesión el proyecto de ley que crea el Sistema de Garantías Recíprocas, que tiene por objeto facilitar el financiamiento formal a las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes).

El proponente de la iniciativa, senador Charlie Mariotti, significó que esas entidades comerciales son de suma importancia en la creación de empleos y en la lucha contra la pobreza.

Tras recordar que, originalmente, fue iniciativa del Poder Ejecutivo, el congresista dijo que una de las dificultades de las Mypimes es el acceso al crédito en razón de que no tienen las garantías o historial crediticio.

Mariotti expresó que la mayorías de esas empresas no tienen relación con los bancos porque son informales.
“Entonces, con esta ley de garantías recíprocas se permite la conformación de una sociedad comercial en la que todos los accionistas son las micro, pequeñas y medianas empresas”, explicó.

Destacó que los bancos que focalizan su interés en las Mipymes pueden reunir 30, 40 o 50 medianos empresarios y constituir una sociedad comercial de garantías recíprocas en las que algunas entidades, como Ademi y Adopem, son accionistas.

El legislador explicó que la reciprocidad consiste en que el microempresario que no tiene la posibilidad de ir al banco, con la garantía de Ademi o Adopem o de un fondo de inversión cualquiera puede acceder a los créditos.

Señaló que, por ejemplo, el cluster de fabricantes del mueble ubica 15, 20, 25, 40 o 50 microempresas de ese sector y formalizar una sociedad de garantías recíprocas.

Destacó que en esa sociedad el banco será el garante mayor o socio protector que les garantiza el acceso al crédito a esas micro, pequeñas y medianas empresas.
Manifestó que el proyecto en cuestión, que ahora pasará a conocimiento de la Cámara de Diputados, es de increíble trascendencia.

Indicó que la legislación crea una Sociedad de Garantías Recíprocas, que tendrá por finalidad el otorgamiento de garantías a sus socios partícipes que así lo soliciten.