El senador perredeísta por la provincia María Trinidad Sánchez, Jesús Vásquez Martínez (Chu),  favoreció ayer la inclusión de la cadena perpetua en una posible modificación al Código Penal, ya que el país no puede seguir siendo una guarida de delincuentes.

Vásquez Martínez afirmó que además de la perpetuidad de la pena a delincuentes reincidentes, se hace necesario endurecer las condenas a aquellas personas que cometan delitos menores.

“Ya es tiempo de que frenemos este avance de la delincuencia, por eso estoy de acuerdo que los reincidentes en violaciones, atracos, asaltos y robos sean sometidos a cadena perpetua, porque de lo contrario después podría ser muy tarde”, precisó Vásquez Martínez.

Aseguró que la propuesta de monseñor Agripino Núñez Collado para que el Código Penal sea modificado, es muy atinada, por lo que se hace necesario unir esfuerzos para llegar a un acuerdo que le devuelva al país la tranquilidad que se merece.

Manifestó que el proyecto de perpetuidad de la pena lo ha sometido en varias ocasiones, pero ha perimido en la Cámara de Diputados, por lo que le pidió a los legisladores de la cámara baja reintroducirlo en el menor tiempo posible.

Por otra parte, Vásquez Martínez deploró el auge que ha tenido la criminalidad en el país, la cual ha dejado una secuela de víctimas, situación esta que mantiene la población en un clima de incertidumbre.

Consideró que el plan de seguridad nacional iniciado por las autoridades no ha llenado su cometido, porque de nada sirve proteger un sector y dejar los otros al descubierto.

“Esto es improcedente, porque es responsabilidad del gobierno garantizar la seguridad de todos sus ciudadanos, no de un sector en particular”, manifestó.

Precisó que esa situación es lo que ha provocado que los delincuentes de un sector se muden a otros, en especial a los sectores más desposeídos.

Indicó que no se puede hablar de barrios seguros mientras los policías sigan ganando salarios de miseria, porque eso crea desmotivación entre los agentes.

Aseguró que en cualquier país del mundo muchos jóvenes esperan con ansias completar sus estudios para ingresar a los cuerpos armados, y servir con dignidad a su patria, a sabiendas que el futuro suyo, y el de su familia está garantizado.