POR PEDRO GERMOSÉN
La mayoría de los senadores del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) decidió anoche engavetar todos los asuntos del poder Ejecutivo, incluso los que había colocado en el orden del día, hasta que el gobierno detenga las cancelaciones de profesionales, técnicos y otros empleados perredeístas y deponga “golpeos y maltratos” contra la organización política.

Los senadores del PRD decidieron también solicitar al presidente Leonel Fernández una cita para tratar los maltratos que según alegan les propina el gobierno, pese a su colaboración, dijeron, desde dentro y fuera del Congreso.

El presidente del Senado, Andrés Bautista García, de Espaillat, afirmó que nunca como ahora se había desatado una «cacería» contra los perredeístas y su partido.

Manifestó que Congreso y gobierno deben «aclarar las reglas del juego» para que la mayoría congresional perredeísta pueda seguir colaborando con la gobernabilidad democrática.

Por su lado, el vicepresidente de la Cámara, César Matías, de Valverde, advirtió que las autoridades del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD) deben precisar «si queremos realmente la gobernabilidad o el caos.»

El congresista de la oposición afirmó que el encabezado por el presidente Leonel Fernández «es un gobierno abusador con características dictatoriales”.

Manifestó que los cancelados, los médicos desatendidos y demás servidores públicos alegadamente «abusados” por el gobierno tienen derechos que los funcionarios gubernamentales les vulneran continuamente.

El vocero de bloque del partido blanco, Aníbal García Duvergé, de San Cristóbal, felicitó al presidente Fernández por retirar la observación a la ley de financiamiento de los partidos, pero hizo críticas por las cancelaciones de maestros, profesionales y técnicos agropecuarios de la administración pública.

Por su lado, el senador César Díaz Filpo, de Azua, denunció que más de 400 parceleros fueron despojados de sus tierras en aquella provincia por el gobierno, que las utiliza, dijo, en la siembra de tomates junto a empresas privadas.

Durante la tarde, cientos de campesinos del asentamiento agrario de La Cruz de Manzanillo en Monte Cristi, y de Hato Mayor, montaron un piquete frente a la sede del Congreso, donde denunciaron que el Gobierno los despojó de tierras en las que fueron asentados por la administración pasada.

El pleno aprobó un proyecto de resolución sometido por el senador Juan Morales, de Hato Mayor, mediante el cual rechazan los atropellos alegadamente cometidos por el director del Consejo Estatal del Azúcar (CEA), Enrique Martínez, y sus subalternos, al desalojar a parceleros de Montecristi y Hato Mayor.

Asimismo, el Senado exige al gobierno el restablecimiento de los derechos adquiridos por los campesinos beneficiados con títulos del Instituto Agrario Dominicano (IAD) en la pasada administración pública.

La resolución original del senador Morales expresa que a los parceleros desalojados les fueron destruidos sus cultivos.

SOBRE LA MESA

En el orden del día estaba colocada la aprobación del nombramiento de cinco embajadores sometida por el poder Ejecutivo, lo cual fue dejado sobre la mesa luego de una discusión entre senadores perredeístas.

Previo a la discusión, el senador Vicente Castillo, de Peravia, solicitó que se incluyera en el orden del día la designación del licenciado Miguel Ángel Velásquez Mainardi, designado embajador en Chile, pero sólo votaron a favor siete de los 23 senadores presentes.

Quedaron sobre la mesa además la designación de los embajadores José Manuel Castillo, en Trinidad y Tobago; Guillermo Piña Contreras, en Francia; Homero Luis Hernández Sánchez, en los organismos de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza; Federico Alberto Cuello Camino, en Bélgica, y Roberto Victoria, en El Salvador.

El senador oficialista José Tomás Pérez, del Distrito Nacional, y el representante de Samaná, Ramiro Espino, pidieron que al pleno la aprobación de los diplomáticos, pero de inmediato fueron enfrentados por Matías, de Valverde, y Alejandro Santos, de Salcedo.

Salcedo dijo que los senadores perredeístas se oponían de manera tajante a la aprobación de los asuntos que somete el poder Ejecutivo, hasta que desista de maltratar a los empleados perredeistas.

Por su lado, el senador Mario Torres, de Dajabón, expresó que este gobierno ni sus funcionarios cumplen los acuerdos y planteó que la democracia es diálogo y consenso.