POR PEDRO GERMOSEN
Tres senadores de la oposición rechazaron ayer la solicitud del embajador estadounidense, Hans Hertell, para que el Congreso Nacional apruebe ahora el Tratado de Libre Comercio (TLC) e incluso varios de ellos lo calificaron de injerencista. Entretanto, el oficialista José Tomás Pérez, del Distrito Nacional, favoreció el pedido de Hertell porque el TLC, sostuvo, es de interés común para Estados Unidos y República Dominicana.

Los senadores Enrique Seijas, Pedro Alegría y Pedro Antonio Luna, del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), plantearon que antes de aprobar el TLC el Gobierno debe compensar al sector productivo nacional.

Seijas, de La Romana, afirmó que la solicitud del diplomático norteamericano constituye «una intromisión vulgar y una falta de consideración y respeto» al primer poder del Estado.

«No es posible que ese embajador esté aquí como un procónsul, molestando todas las áreas productivas, sobre todo la agropecuaria, que está en peligro», dijo el legislador.

Recordó que Chile aprobó el TLC nueve meses después que lo hizo el Congreso de los Estados Unidos y México, un año más tarde.

Afirmó que el TLC sin la compensación correspondiente a los productores nacionales dejaría en las calles a más de medio millón de trabajadores.

Afirmó que el planteamiento del embajador Hertell «es verdaderamente irritante.»

Tras señalar que el TLC podría ser modificado porque sectores poderosos de Estados Unidos consideran que no son bien tratados por el convenio, Seijas expresó que entonces aquí habría que hacer lo propio.

Sostuvo que el Gobierno no ha tomado el TLC con la seriedad y la responsabilidad debidas, en razón de que, sostuvo, se pliega a los dictámenes de Estados Unidos y abandona a su suerte al sector productivo nacional.

Por su lado, el senador Pérez Vásquez, del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), dijo que el Congreso Nacional debe aprobar el TLC sin dilación y que, a partir de ahí, se estudien las medidas compensatorias.

Consideró que Hertell no incurre en injerencia cuando pide al Congreso dominicano que apruebe el convenio, puesto que lo mismo podría hacer un embajador del país con los congresistas norteamericanos.

Al comentar el caso, el senador Alegría, de San José de Ocoa, dijo que está de acuerdo con Hertell, siempre que primero el país sea adecuado para que el sector productivo pueda competir dentro del TLC.

«No veo por qué la prisa sin primero hacer la adecuación fiscal y luego, paralelamente o simultáneamente, conocer el TLC», dijo Alegría.

Expresó que el Gobierno debe jugar su papel y no dejar el caso únicamente en manos de los legisladores, porque, sostuvo, corresponde al Poder Ejecutivo establecer las medidas compensatorias junto al Congreso y los productores.

Advirtió que lo contrario sería llevar al sector productivo a la quiebra, con la consiguiente pérdida de millares de empleos.

Sobre el particular, el senador Papo Luna, de Sánchez Ramírez, dijo que el Congreso no obtemperará al llamamiento de Hertell hasta que los productores sean compensados para que puedan competir con calidad y eficiencia.

Consideró que el diplomático norteamericano estaría cometiendo injerencia al querer trazarle pautas al primer poder del Estado.