Puerto Príncipe, (EFE).- Los senadores haitianos guardaron hoy un minuto de silencio en memoria de sus compatriotas «masacrados en la República Dominicana». El acto de duelo se produjo a propuesta del senador Rudy Herivaux, durante la sesión en la que la asamblea de los legisladores ratificó el plan de gobierno del nuevo primer ministro, Jean Max Bellerive.

El designado jefe del Ejecutivo dijo sobre el asunto que es necesario trabajar para que Haití no parezca «el peor país» del mundo y favorecer la disminución del flujo de haitianos que salen a «buscarse la vida».

La pasada semana, un grupo de políticos, intelectuales y comunicadores haitianos expresó en una carta pública dirigida al presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, su «preocupación por la seguridad» de los haitianos en este último país.

«Le solicitamos, señor presidente (Fernández) que ponga en movimiento un paquete de medidas destinadas a aliviar las tensiones actuales y a favorecer una mejor comprensión entre los dominicanos y los haitianos que viven en la República Dominicana», indicaba el texto.

El documento condenaba «la campaña de odio orquestada en la prensa (dominicana) por sectores y personalidades públicas», quienes se presentan como «aliados» del presidente dominicano.

El presidente del Senado de República Dominicana, Reynaldo Pared Pérez, instó hoy a los políticos e intelectuales locales a enviar una carta al gobernante de Haití, Rene Préval, en la que detallen el apoyo que brinda la nación a los haitianos que residen en el país.

Pared Pérez pidió remitir la misiva a Préval en respuesta a la citada carta, que calificó de «atrevimiento», y aseguró que la intención de la misma es continuar con la campaña de difamación que, según dijo, promueven núcleos de haitianos y organizaciones de la sociedad civil en contra de su país.

República Dominicana y Haití comparten unos 400 kilómetros de división fronteriza y, de acuerdo con cifras oficiales dominicanas, más de un millón de haitianos indocumentados reside en este país.