Hoy 
POR PEDRO GERMOSEN
El Senado y los representantes del Poder Ejecutivo no lograron ayer superar el tranque en que se encuentra el proyecto que derogaría el impuesto al sirope de maíz y que establecería compensaciones para el sector agropecuario, pero las partes acordaron la integración de una comisión mixta que continuará las negociaciones.
Luego de una discusión que promedió las dos horas y 25 minutos, el presidente del Senado, Andrés Bautista García,
y el secretario técnico de la Presidencia, Temístocles Montás, señalaron que la reunión fue «cordial», «amena» y «fructífera.»
Trascendió que los técnicos del gobierno, entre los que estaban también los directores de Aduanas, Miguel Cocco, y de Impuestos Internos, Juan Hernández, pidieron la aprobación pura y simple del proyecto que derogaría el gravamen al jarabe de maíz.
Ofrecieron a cambio negociar la aplicación de algunas exenciones impositivas o compensaciones en beneficio del sector agropecuario a partir de enero próximo.
Sin embargo, aseguraron las fuentes, los senadores habrían rechazado la oferta, por lo que se decidió crear la comisión integrada por los citados funcionarios gubernamentales y una contraparte del Senado.
En la reunión en que también participó el secretario de Estado enlace entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, Laureano Guerrero Sánchez, Montás dijo que las conversaciones fueron «amenas y fructíferas.»
El secretario técnico de la Presidencia dijo que comunicó a los miembros de la Cámara Alta que la aceptación de las exenciones impositivas que los legisladores reclaman para el sector cañero perjudicaría el Tratado de Libre Comercio (TLC), el Presupuesto del 2005 y, sobre todo, el acuerdo «stand-by» que las autoridades negocian con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Montás advirtió que las exenciones impositivas también harían fracasar las negociaciones con el Club de París y la renegociación de bonos con los acreedores internacionales de esos títulos públicos.
El funcionario dijo que durante las conversaciones se exploraron «vías alternativas» que no identificó y agregó que, además, «se abrió un canal de información» entre las partes.
Significó que además quedó patentizado un gran espíritu de colaboración entre el gobierno y el Congreso, relación que, expresó, ya existía entre ambos poderes del Estado.
Montás resaltó que la colaboración entre el gobierno y el Congreso es saludable a la democracia porque ambos poderes son compromisarios del desarrollo político y democrático.
El titular del Secretariado Técnico de la Presidencia admitió que «todavía no hay salida» al impasse surgido con la aprobación en primera lectura de un proyecto de ley original del senador Ramón Alburquerque que derogaría el impuesto al sirope de maíz, pero que establecería una serie de compensaciones al sector industrial, lo que el gobierno rechaza.
La reunión entre los técnicos gubernamentales y unos 24 de los 32 senadores se produjo en la presidencia del Senado entre las 9:45 de la mañana y las 12:10 de la tarde.
EMPRESARIOS
Luego de la reunión con el sector gubernamental, los senadores recibieron a representantes de las asociaciones de Industrias, Dominicana de Bebidas Gaseosas, de Fabricantes de Embutidos y de Empresas Fronterizas.
Por la Asociación de Bebidas Gaseosas estuvo presente el señor Manuel García Arévalo, y por la de Industrias, Yandra Portela, quien se mostró de acuerdo con que el TLC no sea perjudicado.
Sin embargo, Portela dijo que los empresarios nacionales necesitan garantizar la igualdad de condiciones con sus pares extranjeros para poder competir sin desventajas.
Señaló que el recargo cambiario cuya eliminación reclaman los senadores apenas representa RD$750 millones, mientras el Gobierno tiene atrasos con el sector de RD$1,200 millones por devolución del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS) adelantado.
