Uno de los factores es la caída de la demanda del petróleo por retos de pandemia

Expertos atribuyen a varios factores coyunturales y de largo plazo los aumentos que se están registrando en los precios de los combustibles.

Como factores coyunturales se cita la fuerte caída de la demanda del petróleo ocasionada por los desafíos impuestos por la pandemia del covid-19, lo que obligó a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en abril del 2020, a realizar recortes voluntarios en la producción del crudo.

Por ejemplo, Arabia Saudita recortó unilateralmente un millón de barriles por día de producción de crudo para con eso estabilizar el valor de sus exportaciones.

También se recuerda que la industria petrolera de ese país recientemente sufrió ataques terroristas, con aviones no tripulados (drones) y misiles, organizados por grupos militares hutíes en Yemen, lo que impulsó el barril del crudo a US$71,38 en Asia; y a US$ 67,69 el West Texas Intermediate (WTI), Estados Unidos, lo que aumentó a un 2,4 % los contratos de entrega en abril.

Además se señala que en la medida que la demanda se está recuperando por la reducción de las restricciones por la pandemia en los distintos países, esta arrastra consigo los precios a niveles comparables a los de mayo del 2019.

“Si bien es cierto que las empresas estadounidenses pudieron haberse beneficiado con los aumentos de los precios, estas también se vieron afectadas tras la paralización de las operaciones de las refinerías de Texas, Estados Unidos, por la tormenta invernal ocurrida en semanas recientes”, explicó un especialista consultado.

Indicó que “todo esto encarece la cadena de suministro por el mayor capital requerido, perjudica el poder adquisitivo del público y crea las condiciones perfectas para politizar la conversación, asignando de manera muy ligera responsabilidad a los actores del mercado o sugiriendo alternativas no sostenibles y con impactos en multiples sectores”.

En cuanto a los elementos estructurales o de largo plazo, se destacó que la crisis de la demanda, agregada a la crisis climática ha provocado que la mayoría de los productores de petróleo hayan abandonado proyectos de exploración y producción, los cuales hubiesen conducido a un costo de los combustibles demasiado alto combinado a un problema medio ambiental.

Por lo tanto, el abandono de dichos proyectos disminuirá los niveles de producción y provocará una tensión en la oferta, considerando que la demanda de energía por parte de la población mundial que va creciendo y desarrollándose podría no ser totalmente compensada por el desarrollo de las fuentes de energías sostenibles.

Hasta el momento, diversas razones han contribuido para que existan alzas internacionales del petróleo, las más altas en un periodo de 18 meses.
Se explicó que los combustibles como los demás productos obedecen a la ley de la oferta y demanda.

“Cuando hay más demanda que oferta los precios suben y actualmente existe un alineamiento de elementos, algunos coyunturales y otros más duraderos, los cuales provocan la tendencia alcista de los precios”, manifestó el especialista.
Se puede esperar que parte de los coyunturales se reviertan en las semanas o meses próximos, disminuyendo así la tendencia alcista de los precios, pero no será lo mismo para los elementos de largo plazo por razones estructurales.

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La gran pregunta
“La gran pregunta ahora es como nos organizamos para construir soluciones sostenibles y duraderas que estén en consonancia con la necesaria recuperación económica del país”, manifestó un especialista . El mercado del petróleo ha estado influido en los últimos meses por la evolución de las medidas contra la pandemia y sus efectos en las previsiones de demanda de crudo.