La directora del Seguro Nacional de Salud (Senasa) aseguró ayer que funcionarios de instituciones estatales como la Junta Central Electoral (JCE), la Suprema Corte de Justicia, la Cámara de Cuentas y el Congreso no cotizan a la seguridad social, lo que pone en peligro la sostenibilidad del sistema.
Sin embargo, aseguró que el seguro estatal será perdurable, pues toda su plataforma es tecnológica y no facilita que aún en un cambio de gestión, la institución pueda ser vulnerada con acciones populistas.
La doctora Altagracia Guzmán Marcelino habló en estos términos durante su participación en el Almuerzo de los Medios de Comunicación del Grupo Corripio.
A su juicio, para que estos empleados comiencen a cotizar se necesita tomar decisiones que fortalezcan al sistema y eso es una responsabilidad del Consejo de Seguridad Social.
No hemos llegado a la no sostenibilidad, pero si no se aplican los correctivos y se toman las decisiones correctas a la mitad de un mediano plazo, eso va a llegar, dijo Guzmán Marcelino, al reclamar que comiencen a cotizar al sistema las personas que más ganan.
Instituciones del Estado, cuyos funcionarios tienen elevados salarios no están cotizando al sistema de seguridad social.
En el caso del Congreso, dijo que los empleados administrativos, una parte de ellos están afiliados en el Senasa, pero no los legisladores, insistió.
Todo claro claro. Las cuentas del Senasa están claras, dijo su directora y el equipo de economistas que la acompañó.
El Estado paga a través de la Tesorería de la Seguridad Social en forma religiosa los recursos para el régimen subsidiado que ya sobrepasa los 2 millones de afiliados.
Medicina Familiar.
Para evitar el colapso del sistema de seguridad social, a sus diez años de inicio, es necesario que se implemente el modelo de atención, pues en la actualidad, una persona si le duele un dedo va a un galeno con una subespecialidad, sin entrar por un el médico de familia.
Se trata de servicios costosos, pero además, se necesita que se implementen los protocolos, pues esos son pilares fundamentales del sistema.
La funcionaria, quien estuvo acompañada de Chanel Rosa, Jeffry Lizardo, Nicolás Peña y Carlos Rodríguez, gerentes, abogó por la ampliación del régimen subsidiado, le falta 1.4 en la meta de afiliación para el 2012.
La red pública es una necesidad y debe ser implementado, aseguró.
Están de acuerdo en que el modelo de seguridad social tiene numerosos defectos, pero también explican que ha habido avances significativos.
Como un ejemplo de eso, se refirieron a que si un afiliado del régimen subsidiado necesita un servicio, si no está en la red, lo cubren donde esté.
Bajar la inequidad. De su lado, el economista Jeffry Lizardo, abogó por la universalización del SFS como forma de bajar la inequidad social y los altos costos que tienen los dominicanos en materia de salud..
Dos regímenes
Para el economista Jeffry Lizardo, es necesario reviusar la ley 87-01 de seguridad social, pero para Chanel Rosa, en numerosos aspectos de la ley no se necesita una modificación.
Es asunto de regulación y de rectoría del sistema de seguridad social.
La actual Ley 87-01 tiene tres regímenes para su funcionabilidad, los subsidiados, que son los pobres y empleados del Estado, los contributivos o cotizantes y los contributivos subsidiados,
Sólo han sido afiliados dos millones de constributivos o empleados privados y dos millones de subsidiados.
Existe una propuesta en la que se sugiere la eliminación del contributivo subsidiado, debido a las dificultades para ponerlo en marcha.
Sólo el 45% de la población del país esta afiliada en el SFS, DE ESOS EL 21% es subsidiado y el 24% es contributivo.
El 57 por ciento de la población económicamente activa carece de seguro médico y tiene un alto costo de bolsillo para poder recibir servicios médicos.
El principal problema con el contributivo subsidiado es la forma de cotización, pues se trata de trabajadores sin patrón.