A someter su gestión municipal a un Estudio de Impacto Ambiental y Social (E.I.A.S.) que en un acto público y sin mucha coordinación previa, podrían realizar profesionales, universitarios, del área de las ciencias sociales y naturales con los munícipes, para evaluar los impactos físicos, sociales y ambientales, de sus años acumulados a la cabeza del Ayuntamiento de la capital.
Ninguna ciudadana se atrevió a plantear, un EIAS a los síndicos del país que quieren reincidir en el cargo, pero tampoco ninguno de ellos, se atrevió a plantearse un E.I.A.S. a su gestión: Sin embargo, sería como una rendición de cuentas ampliada a la evaluación de los efectos/impactos y de la eficiencia obra/costo/beneficiarios de sus políticas en su ciudad, para que los munícipes supieran si realmente se cumplió lo prometido durante la campaña electoral y los impactos de lo que se hizo.
Y verá entonces, señor Salcedo, que nadie como Usted, antes, gozó de condiciones tan excepcionales.
Usted maneja un territorio pequeño y en proceso de despoblación.
Usted disfrutó como nadie del apoyo del Gobierno Central, como los Comités Intermedios disfrutan del suyo.
Usted fue bendecido con tantos recursos que los gastó a su antojo.
Sus ambiciones presidenciales evidentes le hicieron transformar el Ayuntamiento en un palacio donde los roles se dignificaron y jerarquizaron, pasando del Secretario General omnipresente y vocero oficial de sus políticas, a un equipo técnico invisible, burocratizado, elitista (su DIAPE) que elabora planes y normativas sin confrontarlos a la realidad ,hasta la formación de una especie de corte real con la Sala Capitular, llena de cortesanos de todos los partidos confundidos, satisfechos y obedientes que apoyaron sin opugnar ni parpadeo alguno todas y cada una de sus iniciativas, incluyendo una recaudación voraz, el otorgamiento de permisos de torres en zonas de baja densidad, y una gestión de los espacios públicos populista en algunos casos, elitista en otros, sin olvidar proyectos como la Isla Artificial, el Helipuerto y la siembra de palmas anti sociales y anti ecológicas en la ciudad.
Usted inició su gestión con demasiada suerte, algo parecido a la auyama.
Seguiremos.