POR NELLY RAMÍREZ Y MARÍA MERCEDES
¡Hola Tania, Jatnna! ¡Sharmín, mi amor qué bella estás! ¿De quién es tu traje? ¡Isaura, Divaaa, Lupita, Idelsa, Luz, Oscar, baila un poquito!, fueron algunas de las expresiones del público que se congregó en las afueras de la Alfombra roja para observar la llegada de los artistas nacionales y extranjeros que se dieron cita en la XXI entrega de los premios Casandra, de la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), patrocinado por la Cervecería Nacional Dominicana y copatrocinado por Verizon Dominicana.

Pasada las 6:00 de la tarde, cuando los rayos del sol aún no se ocultaban y se podía sentir la brisa fría que nos toca al caer la noche, las emociones se tornaban al rojo vivo. En ese momento, y al ritmo de las palabras mágicas: “luces, sonido, cámaras y acción” inició el pre show de los premios Casandra con el desfile por la Alfombra roja de las luminarias de esa noche.

Esta vez la alfombra roja fue colocada en la parte lateral del Teatro Nacional, a la entrada principal de la Sala Eduardo Brito, en forma de espiral, para dar mayor oportunidad a los artistas de exhibir y lucir sus galas, muchas de ellas confeccionadas por destacados diseñadores dominicanos. A ambos lados de la entrada fueron colocados elegantes arreglos con flores multicolores, follajes, palmeras y grama, lo que daba al entorno un aspecto de jardín en tiempo de primavera.

Un desfile de elegantes y vistosos automóviles de diseños modernos, clásicos y antiguos, llegaron hasta la entrada de la Alfombra roja para dejar a los artistas nominados y las personalidades invitadas que concurrieron al Casandra 2005. Frank Reyes, uno de los más galardonados de la noche, llegó en una yipeta Hummer roja, y fue de los últimos en hacer su aparición.

Pero no sólo en este medio de transporte llegaron los artistas, sino que algunos utilizaron carros de transporte público –en muy mala condición–, como fue el caso de la actriz dominicana Zoé Saldaña, mientras que Pavel Núñez llegó en un coche tirado por caballos con su pequeño hijo en brazos, así como “El negrito de Villa” Sergio Vargas, que llegó en una carroza con diablos cojuelos.

Cada vez que una personalidad o artista de la televisión hacía acto de presencia se escuchaba a la seguridad del evento decir: “Atrás, atrás, no pueden estar ahí, dejen circular el vehículo”; de inmediato se escuchaban voces cargadas de adrenalina, algarabía y unos que otros piropos.

Los más simpáticos saludando al público y firmando autógrafos fueron: Ciudad de Ángeles, Negros, el salsero venezolano Oscar D´León, la veterana actriz Lupita Ferrer, Frank Reyes, El Jeffrey, Eddy Herrera, Sergio Vargas, Aljadaqui, Milagros Germán, Sharmín e Isaura Taveras.