Aunque tras la reducción de la calificación de la deuda de Estados Unidos por parte de Fitch, los mercados hablan de un riesgo crediticio global, que podría tener repercusiones a largo plazo, hay otros analistas como Quincy Krosby, estratega jefe mundial de LPL Financial en Charlotte, Carolina del Norte, que destacan que puede tener sus puntos positivos.
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“A veces es saludable que se produzca esta digestión en el mercado, ya que rebaja un poco las valoraciones y permite realizar compras a la baja”, dijo.
La reducción de la calificación de la deuda estadounidense provocó descenso en los índices bursátiles la jornada del martes en Wall Street y otros mercados en la jornada del miércoles, pero este jueves los principales índices se dieron la vuelta, repuntando, aunque los bonos siguieron cayendo, lo que se reflejó en la subida de sus rentabilidades.