MASON, Ohio. Serena Williams volvió a derrotar a Caroline Wozniacki para alcanzar la final del torneo de Cincinnati, un certamen que se la ha resistido durante su carrera. Viniendo de atrás, Williams se impuso el sábado 2-6, 6-2, 6-4 frente a Wozniacki, y ahora jugará en la final contra la serbia Ana Ivanovic, quien se impuso a la rusa Maria Sharapova (5ta preclasificada), por 6-2, 5-7, 7-5, en el duelo nocturno.
Fue la octava victoria de Williams en nueve partidos ante Wozniacki. La número uno del mundo cedió un set por primera vez en el tornes y cometió 41 errores no forzados, 20 más que la danesa.
En las semifinales de hombres, el suizo Roger Federer doblegó al canadiense Milos Raonic (5to) por 6-2, 6-3, mientras que el español David Ferrer (6to) doblegó 6-3, 6-2 al francés Julien Benneteau. Federer buscará el domingo su sexto título en este torneo. Williams tuvo que jugar con rigidez en la parte baja de la espalda.
“Fue cuando me pude relajar, para ser honesta. Fui más agresiva al buscar los tiros, ir a la red más, como si no tuviera nada que perder”, dijo Williams. También intentó acortar los puntos con su servicio, lo que derivó en una efectividad de 58% de sus saques. “Tenía que tirar bombazos porque no me estaba sintiendo bien”, dijo. “Me dije: `intenta meter aces para ver qué sale’. Y me empezó a funcionar. Ahora espero que tenga bien el brazo para mañana”.
Williams jamás ganó el Masters de Cincinnati en cinco intentos. El año pasado perdió un desempate en el tercer set ante Victoria Azarenka. Williams y Wozniacki tuvieron dificultades con sus saques y entre ambas sumaron 15 quiebres, incluyendo en los cinco primeros games del tercer set. “No estuve muy efectiva con mi primer saque”, se lamentó Wozniacki. “Y cuando los metía, pues no eran los mejores. Es frustrante porque pierdes un set 6-4 en el tercero y sólo una vez pudiste defender tu saque”.