Shanghái (China). El director de cine colombiano Sergio Cabrera, uno de los cineastas más reconocidos de su país, que se encuentra esta semana en China para el lanzamiento de un ciclo de cine colombiano en Pekín, aseguró hoy en Shanghái que “para ser interesante, el cine debe mostrar la realidad y decir la verdad».
Para el autor de “La estrategia del caracol” (1992), “Ilona llega con la lluvia” (1996) o “Perder es cuestión de método” (2004), que también estudiará estos días posibles coproducciones en China, en esos principios está “la esencia del cine independiente, la única forma de competir con ese cine de juguete que hace tanto Hollywood».
Frente a esa “gran industria que busca formas de abstraerse de la realidad, y de decir mentiras que parecen verdad, como los superhéroes, las historias de terremotos y maremotos, tan alejadas de lo que yo entiendo por cine”, está el compromiso de los creadores libres con una “responsabilidad social que no se puede eludir».
Y esa es precisamente una de las cosas que caracteriza al cine colombiano actual, que “está pasando por muy buen momento”, con más de una treintena de nuevas películas al año, “casi todas muy interesantes”, afirmó, lo que probablemente resultará llamativo en para los productores chinos que se acerquen al cine de Colombia.
“Aunque los cineastas sabemos en España, en Colombia, en China, que la gente prefiere las comedias, uno se pone a ver y la mayoría de las películas que se hacen en estos países son dramas, porque los cineastas por lo general son gente muy sensible a los problemas sociales, sienten una gran responsabilidad social”, aseguró.
“En general son gente con una mirada muy crítica de la sociedad, y creo que esa es la responsabilidad principal de los intelectuales, que no podemos cambiar la sociedad, por muchas películas, o cuadros, o poemas que hagamos”, explicó, “pero uno sí puede indicar dónde están los problemas que hay que solucionar».
Eso hizo hoy Cabrera, que pasó parte de su juventud en la China de la Revolución Cultural, y que impresionó a decenas de estudiantes chinos de español con la proyección hoy de su película “Todos se van” (2015), en el Colegio de Economía y Humanidades Xianda de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghái (SISU).
El director colombiano, que firmó también reconocidas series de televisión, como “La Pola” y parte de la española “Cuéntame cómo pasó”, aunque es consciente de que China por ahora no se permitirá un cine del todo independiente, alaba del gigante asiático que, con todo, algunas de sus cintas son “muy críticas e interesantes».
Cabrera está estudiando, además, la posibilidad de hacer varios proyectos en colaboración con el país oriental, entre ellos una versión china, ambientada en los años treinta, previos a la República Popular, de “La estrategia del caracol”, cinta que pudo montar con el ánimo y la ayuda en la difusión de García Márquez.
A esa idea se suma la posibilidad de filmar otra película sobre la juventud del propio Cabrera en China, ya que vivió en Pekín entre 1962 y 1968 y luego de 1972 a 1974, coincidiendo con los años de la Revolución Cultural (1965-1975) en los que el país se paralizó y fueron muy escasos los extranjeros que lo vivieron desde dentro.
El cineasta, que aún habla un mandarín fluido y correcto, con giros de expresión que se notan asimilados por años de contacto con la calle, como demostró hoy en la universidad shanghainesa, también está estudiando un tercer guión, relacionado con China, que ha despertado su interés. E