Servicios públicos afectan presupuesto

Servicios públicos afectan presupuesto

POR L. RAMÍREZ S.
En la  República Dominicana la «comodidad» cuesta, pero no aquella que se asemeja al lujo, sino la simple provisión de los  servicios fundamentales que demandan las sociedades urbanas, sin contar  los renglones alimentación y salud.

Todo comienza con el deficiente servicio eléctrico, y con el escaso suministro de agua potable.

El testimonio de un profesional de clase media alta, médico dedicado al pluriempleo por necesidad, evidencia que el «confort a la dominicana» conlleva grandes sacrificios económicos.

Solamente por consumo de agua, luz  y gasolina consigna RD$17,000 mensuales (más de dos salarios mínimos). RD$3,000 conciernen al «servicio eléctrico»,  RD$2,600 por la compra de agua para abastecer su cisterna, y RD$12,000 en combustible porque en la casa hay dos vehículos que se utilizan para el trabajo y asuntos domésticos.

El exceso de gastos comenzó cuando Alberto Méndez decidió construir una casa en el residencial Las Amapolas, de Cancino, en  Santo Domingo Este.

El presupuesto se incrementó en alrededor de RD$50,000 por la construcción de una cisterna.

«Pero como nunca hay energía eléctrica no te debes parar ahí, sino que tienes que comprar un tinaco que vale entre RD$4,000 y RD$5,000.

«Igualmente por la ausencia de un sistema cloacal tuve que hacer un pozo séptico, por eso tuvimos un gasto adicional de RD$150,000 para no tener problemas con el suministro de agua y resolver el de las aguas residuales».

En cuanto a la luz, que no llega por más de seis horas al referido sector, la tarifa que paga oscila entre los RD$2,500 y RD$3,000, pero para contrarrestar el deficitario servicio instaló un inversor de 2.5 kilos, con ocho baterías,  que le costó 50 mil pesos.

FAMILIA PEQUEÑA CON GASTOS GIGANTES

Alberto Rodríguez es un profesional liberal, dedicado principalmente a la crónica deportiva, que invierte la mayor parte de sus ingresos en asuntos domésticos.

Reside en Las Praderas, en el Distrito Nacional, donde paga un alquiler de RD$15,000 por el apartamento en que vive con su familia. Alrededor de RD$14,000 mensuales gastan él y su esposa en gasolina, y por concepto de electricidad entre RD$4,000 y RD$5,000, aunque para suplir las deficiencias de ese servicio compraron un inversor valorado en RD$17,000, y por supuesto un tinaco para almacenar agua, por  cuatro mil pesos.

Se suman a su lista de compromisos los RD$2,000 de mantenimiento del condominio, que incluye pago de agua, de servicios de seguridad y limpieza; en adición hay que incluir RD$3,500 para la doméstica.

EL TRANSPORTE: UN HOYO FINANCIERO

Los esposos Hilda Mateo y Pedro Rodríguez consignan en su cronograma de gastos RD$1,800 al mes solamente para el transporte del trabajo a la casa, y no es más porque utilizan básicamente el que ofrece la  Oficina  Metropolitana de Servicio de Autobuses (Omsa).

Entre los dos perciben ingresos ascendentes a RD$26, 100, de los cuales RD$4,000 corresponden al alquiler de la vivienda, ubicada en Invivienda,  Santo Domingo  Este.

Incluyen RD$1,000 para el pago de electricidad y RD$150 por el servicio de agua.

La doméstica tiene un salario de RD$2,500, y por concepto de teléfono y telecable pagan RD$1,250.

UN SOLTERO SIN HIJOS

Federico Cabrera es soltero, reside en Los Prados, en el Distrito Nacional, en un apartamento-estudió que  hace cuatro años adquirió en RD$400,000.

Para ahorrarse malos ratos, lo primero que hizo fue comprar  un tinaco para agua, que en 2002 costaba  RD$3,000, y un inversor de medio kilo por  un valor de RD$12,000.

El recibo de la electricidad no baja de RD$ 1,500, «y  por un milagro del desorden del país» en su edificio no se paga agua.

A más de RD$4,000  asciende su consumo de gasolina al mes, «pero yo no me quejo mucho porque mis gastos principales los saldo con tarjeta de crédito, aunque los  intereses sean altos».

Publicaciones Relacionadas

Más leídas