El dominicano Luis Severino ha hecho todo y mucho más en el montículo en la temporada del 2018.
Y en el camino, se ha convertido en el principal lanzador de la novena de los Yanquis de Nueva York.
Severino ha hecho 13 aperturas y doce de ellas han sido de calidad, incluyendo la de ayer, contra los Tigres de Detroit, en la que trabajó ocho entradas y solo toleró cuatro indiscutibles y dos carreras, una de ellas limpia, al tiempo que abanicó 10 y no otorgó boletos en una magistral presentación de 112 lanzamientos.
Severino no pierde un partido desde el 10 de abril ante los Medias Rojas de Boston, su única salida que no ha sido de calidad este año, cuando permitió cinco vueltas.
Desde entonces ha ganado siete juegos en forma consecutiva y ahora registra foja de 9-1 y 2.20 de efectividad en el 2018, con 102 ponches y un WHIP de 0.92.
“(Severino es) un bulldog en el montículo”, dijo el receptor Austin Romine.
“Es un tipo que confía en su repertorio. Aun en días en los que quizás no está en un 100 por ciento, él puede imponerse y lanzar muy bien. Creo que esa es una señal clara de lo que es un estelar”.
Y precisamente en eso es que se ha convertido Severino, en el estelar de los Yanquis de Nueva York que lideran la División Este de la Liga Americana.