ZARAGOZA (España), EFE.- Shakira volvió , después de tres años, a retomar el contacto con el público en un concierto en Zaragoza que inauguró su gira mundial, y al que la cantante quiso dotar de tintes étnicos, que aderezaron el tradicional movimiento de sus caderas.
Ante más de 15.000 personas, en un concierto celebrado en la Feria de Zaragoza (noreste español), la colombiana apareció en el escenario vestida con un pantalón negro ancho, una camiseta amplia, también negra, y zapatillas de deporte del mismo color; la melena suelta y sin maquillaje.
Con un Buenas noches, Zaragoza y la canción Estoy aquí, la artista se encontró con los mañicos, a los que saludó efusivamente.
Shakira llegó a la capital aragonesa el 28 de mayo, para preparar el concierto que abre su gira mundial, que la llevará hasta el día 5 de julio a otras diez ciudades españolas.
Shakira se mostró emocionada y tímida, y la música parecía elevarse por encima de su potente voz, que sacó de dentro para recordar que durante quince días ha ensayado su gira en esta ciudad.
La artista sorprendió al público, entre los que había numerosos compatriotas de la colombiana, nacida en Barranquilla, con los acordes de su armónica y con los arranques de varias guitarras, que sacó al escenario para acompañar a su equipo, al que agradeció al finalizar el concierto su trabajo y su dedicación durante tantos años.
Mezclando canciones de sus nuevos y viejos trabajos, en un concierto denominado como su último disco, Fijación Oral, la cantante encontró el respaldo del público, sobre todo, al cantar en español.
Para acometer uno de sus grandes éxitos, La Tortura, la Shakira del vertiginoso movimiento de caderas se subió la camiseta negra, dejó al aire su ombligo y contagió de ritmo al público.
Tras este tema, cambió el recatado atuendo negro por un vestido largo rojo, para interpretar Veneno, y después volvió a cambiarse.
Se puso entonces un top brillante y una falda de flecos, que sirvió para acentuar el ritmo de sus caderas.
Una hora después de haber comenzado el espectáculo, Shakira anunció el final, pero los gritos y aplausos del público hicieron que saliera por segunda vez y, en los bises, entonó el éxito de su último disco, Hips don’t lie (las caderas no mienten).
Y las suyas no lo hicieron, y tampoco decepcionaron a los seguidores de la cantante, totalmente entregados a estas alturas del espectáculo.
La colombiana se despidió definitivamente del público zaragozano envuelta en una nube de confet.