POR ENRIQUE ROJAS
ESPECIAL PARA EL NUEVO DÍA
MIAMI, Florida.- Shaquille O’Neal, la fuerza más dominante de la NBA, está ansioso por el comienzo de la próxima temporada, pero también por jugar un partido de exhibición en Puerto Rico.

O’Neal cumplirá su segundo deseo el próximo viernes 14 de octubre, cuando los Heat de Miami, uno de los grandes favoritos a conquistar la corona de campeón de la NBA en la campaña 2005-06, enfrentará a los Grizzlies de Memphis en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot.

“Será algo excitante”, expresó O’Neal a El Nuevo Día, el lunes en el American Airlines Arena.

“Además de mostrar mi juego a los aficionados boricuas, aprovecharé para conocer las playas, el paisaje y la ciudad de San Juan”, agregó el gigante de los Heat.

El defensa tirador Dwayne Wade, quien forma con O’Neal la mejor pareja de la liga, ya jugó en San Juan en el 2003, cuando se preparaba para su primera temporada en la liga.

“Nunca olvidaré la experiencia. Ese fue mi año de novato y todo fue muy excitante en Puerto Rico”, precisó Wade.

Miami derrotó 86-79 a los Sixers de Filadelfia en un encuentro que se fue a tiempo extra y que fue celebrado en el Coliseo Roberto Clemente el 7 de octubre del 2003.

El partido de este año será el quinto que realiza la NBA en Puerto Rico. En todos han estado presentes los Heat de Miami.

Otros encuentros que se realizaron en la isla, incluyen los juegos entre los Heat y los Nuggets de Denver en el 1993 y una serie de dos encuentros entre los Heat y los Hawks de Atlanta en el 1994.

En sentido general, será el octavo encuentro internacional (sexto en Latinoamérica) para Miami en su historia de 17 años de existencia.

“Somos el equipo de Puerto Rico. Creo que los aficionados puertorriqueños deberían adoptarnos como su equipo nacional”, señaló el entrenador Stan Van Gundy.

Como parte del acuerdo entre la NBA y los promotores del partido, tanto Miami como Memphis se comprometieron a llevar sus nóminas completas. Esto permitirá a los boricuas ver en la cancha a los estelares O’Neal, Wade, Gary Payton, Antoine Walker, por Miami, y al español Pau Gasol, por Memphis, entre otros.

“Esta es una forma de elevar la estatura internacional del baloncesto. Disfruté mucho cuando fuimos a República Dominicana y Puerto Rico en el pasado reciente”, agregó Van Gundy.

La temporada pasada, Van Gundy guió a los Heat a su mejor desempeño en la NBA, cuando alcanzaron la final de la Conferencia del Este, donde perdieron ante los Pistons de Detroit.

Para alcanzar el próximo escalón, y buscar su primera corona de campeón, Miami tuvo una pausa de temporada bastante movida.

Los Heat extendieron el contrato de O’Neal (cinco años y $100 millones), firmaron a Payton y Michael Doleac como agentes libres, retuvieron al centro Alonso Mourning y se involucraron en una histórica transacción (que mudó a 13 jugadores de cinco equipos) para atraer a Walker, Jason Williams, James Posey y Andre Emmett.

“Este no es un equipo de dos jugadores”, dijo Van Gundy. “Aquí todo el mundo tendrá que hacer su contribución para que logremos nuestros propósitos”.