Si eres mujer y vives en RD corres el riesgo de morir asesinada por tu pareja o expareja

Si eres mujer y vives en RD corres el riesgo de morir asesinada por tu pareja o expareja

En eso pienso, en el cuidado de elegir a mi pareja, en mis amigas y hermanas. En el riesgo de morir o verlas morir  en una situación como esa.

Así de grave y contundente es la realidad de las mujeres y adolescentes  en República Dominicana a juzgar por una ola de feminicidios que con frecuencia  nos afecta, y cada vez de manera más normalizada se instala ante la insuficiencia de políticas públicas conducentes, un sistema de justicia negligente y un proyecto de ley enfocado en la prevención que brilla por estar engavetado en el Congreso Nacional.

Y es que a pesar de los esfuerzos del Ministerio de la Mujer, que impulsa la pieza, parece ser que para la mayoría el tema de violencia de género no está dentro de sus prioridades y sólo es noticia cuando implica un impacto mediático o cada 25N.

A pocas horas del inicio del año 2024, en el país ya se contaban las mujeres asesinadas a manos de sus parejas y ex parejas y sólo en el primer trimestre, según las cifras oficiales, 13 perdieron la vida en las mismas circunstancias.

Lamentablemente los hechos ocurridos durante los primeros días de junio han disparado nuevamente las alarmas sobre el tema, quisiera que fuera más que eso, más que ruido mediático, y es que  5 nuevas víctimas se sumaron a lista, dos de ellas en hechos ocurridos el pasado domingo a horas de diferencia. 

Liann Guerrero Bobadilla, Raisa Guzmán, Isabel Pimentel, Miledys del Rosario Carrasco de los Santos y Daisy Margarita Encarnación Brea, eran sus nombres.

Ante la situación, el presidente Luis Abinader reconoció ayer  que el tema de los feminicidios es complejo, lo que me sorprendió es que haya dicho  que las causas de esta problemática van «más allá de la acción de un gobierno.»

Señor Presidente el Estado es con lo único que cuentan muchas de las mujeres dominicanas que sufren un ciclo de violencia, y la prevención a través de una educación integral es responsabilidad del gobierno. El Ministerio de la Mujer que dirige Mayra Jimenez necesita más recursos, y  sobre todo mayor voluntad política. Esas también son acciones de un gobierno.

No obstante,  también reconozco que es un asunto integral en el que todos los sectores deben aportar su cuota, los medios de comunicación por ejemplo,  en no revictimizar ni justificar estos hechos. Por enésima vez: los feminicidios no son hechos “pasionales” como muchas veces aparecen en los titulares.

Ojalá lleguemos al día en que ningún  hombre se sienta  con el derecho de acabar con la vida de su pareja o ex pareja y que ninguna sociedad  normalice y valide  las conductas machistas que son el caldo de cultivo de este lamentable patrón.

A todo esto, también pienso en que todavía no sabemos ni hemos dimensionado el impacto social que generará a largo plazo  los cientos de niños y niñas que han quedado en la orfandad  producto de este flagelo. Esa “cosecha” también es parte de nuestro futuro como sociedad.

Finalmente, extiendo un abrazo solidario a todas las familias que atraviesan el dolor de perder a sus hijas, madres, hermanas, tías y sobrinas en tan dolorosas circunstancias. A quienes ahora les toca decir  “ella era.”