En guisos, ensaladas, en una sopa, las lentejas siempre caen bien. La versatilidad que las caracteriza, hace posible que esta legumbre se consuma todos los días, pero de una forma diferente.
Para nadie es un secreto que en los últimos tiempos se ha convertido en una de las más populares.
Además de que las hay de diferentes tipos; color marrón, verde, naranja, amarillo y negro, y se pueden comprar enteras o partidas. Esto la hace aún más interesantes.
Para cocinarlas, es necesario dejarlas en remojo por algunos minutos (10 minutos son suficientes), lo que facilita un rápido cocimiento. Las de color negro son las que menos tardan en cuecerse.
Para los niños, que muchas veces no les gustan este tipo de comidas, es posible preparar un delicioso puré, si se toman las lentejas más pequeñas de color amarillento y naranja. Al ser muy blandas, estas son más fáciles de majar o aplastar.
Las demás se mantienen enteras después de la cocción, pudiendo servirse como acompañamiento, solas o en ensaladas.
En la cocina india, las lentejas son muy utilizadas, donde se preparan en currys y guarniciones.
En España, se consideradan joyas auténticas. Además en Perú y Colombia, también se consumen.
El caso dominicano. En el país, su consumo también es alto. Hay quienes las acompañan con arroz o víveres.
Los ingredientes que se utilizan para condimentarlas son variados. Además de los sazones tradicionales como ajo, verduras, vegetales… se les incorpora longaniza, chuleta, costillitas o salchicas, lo que le imprime un sabor delicioso. Pero además, el olor que sale de la cocina cuando las lentejas están en la estufa, es simplemente tentador.
Valor nutritivo. Es un alimento con una alta concentración de nutrientes. Contiene vitaminas B1, B3 y B6.
Las legumbres en sentido general pueden comerse tiernas, secas, de forma cocida, fritas, y de la forma más inimaginable. Pero desde el punto de vista nutricional se recomienda que se consuman las tiernas. En tanto que, desde el punto de vista de la gastronomía, y por la variedad de estilos de preparación, las secas son las que más se utilizan.
Un producto que se intercionalizó. Aunque su consumo es universal, esta especie es originaria del Cercano Oriente.
Las recetas
Ensalada de lentejas con cebolla
Media taza de lentejas
2 cebollas medianas
Aceite de oliva
Jugo de limón
Sal y pimienta
Preparación. Colocar las lentejas cocidas en un bols, y agregarles las cebollas picadas muy finamente. Condimentar con sal, aceite de oliva y jugo de limón y agregarle pimienta al gusto.
Sopa de lenteja con zanahoria
1 cda de aceite, 1 cda de cebolla, 2 dientes de ajo picado, apio, 2 zanahorias, media taza de lentejas, 1 litro de caldo de verduras, 3 cdas de jugo de limón, 3 cdas de salsa de soja, sal y pimienta.
Preparación. Cortar los apios y zanahorias en trozos pequeños. Separar las partes verdes y blancas de las cebollas de verdeo y picar. En una olla grande calentar el aceite, agregar el ajo, cocinar por 2 minutos. Agregar el apio y la zanahoria, cocinar otros 2 minutos. Agregar las lentejas, cocinar por 1 minuto revolviendo frecuentemente. Agregar el caldo de verduras y dejar cocinar hasta que las lentejas estén tiernas. Condimentar con jugo de limón, salsa de soja, sal y pimienta.
Crema de lentejas
1 taza de lentejas
1/2 longaniza
1/3 de taza de arroz
1/2 unidad de morrón rojo
1/2 caluga de caldo de ave
Sal al gusto
Orégano al gusto
2 cucharadas de aceite
1/3 de taza de salsa de tomates
1/2 unidad de cebolla mediana
1 diente de ajo
Queso parmesano o perejil para decorar
Preparación. Cocer las lentejas con agua fría y sal a gusto por unos 10 minutos contando desde que empiece a hervir el agua. A parte de coce el arroz con sal, por unos 18 minutos. En un sartén con el aceite, cebolla, ajo, orégano, el caldo de pollo, longaniza cortada en trocitos, morrón cortado en cuadritos se hace un sofrito. Se agrega la salsa de tomates. Se revuelve bien. Y se retira del fuego. Una vez cocidas las lentejas, sin mucha agua, se le agrega el arroz cocido y el sofrito anterior. Se revuelve todo hasta integrar bien. Luego todo esto se pasa por la licuadora o picadora. Se calienta una vez más antes de servir y se decora con queso parmesano o perejil.