Resignación. No hay otra cosa que hacer con el cine de Hollywood y las carteleras de nuestras salas. Efectos especiales, secuelas y remakes. Eso es todo.
Hoy nos vamos por el lado de los remakes.
Cuando en el cerebro ya no queda nada, cuando la imaginación se ha ido de vacaciones a otra parte y las musas ya no ayudan, lo más fácil y saludable es recurrir a las nuevas versiones y eso es lo que hacen los guionistas.
Aunque algunos de ellos, como sucede en el presente caso del Rescate del Pelham 1, 2, 3 cuenten en su currículo con trabajos tan notables como el de L. A. Confidencial.
Este remake del que fuera notable filme de acción de 1974 es el estreno estrella de la semana, ya que la Fuerza G no va a hacerle ni sombra.
No hay más nada, a no ser que usted tenga como asignaturas pendientes algunas cintas que permanecen en ciertas salas desde pasadas semanas y siempre es más conveniente sonreírse un poco con The proposal, que tampoco es que sea nada extraordinario.
Rescate del Pelham 1,2,3. Título original: The Taking of Pelham 1,2,3. Director: Tony Scott. Intérpretes: Denzel Washington, John Travolta, Luis Guzmán, John Turturro, James Gandolfini y Ramón Rodríguez.
Aunque sean hermanos y se apelliden Scott, no es lo mismo Ridley que Tony.
El cine de Ridley nos apasiona, nos motiva, pese a sus desaciertos ocasionales, y siempre le tendremos una deuda de gratitud por haber hecho Los duelistas.
Trabajo excesivo. El de Tony no nos interesa demasiado y nos llega a molestar con sus excesos de producción, ya que siempre parece que nos quiere decir que en aquellas imágenes se han invertido millones y más millones de dólares.
Además, desde Man on Fire se ha sumado a la lista de los hacedores de remakes y, después del Pelham volverá a la carga con The warriors, talvez para aprovechar el Metro.
Mucha técnica y poca humanidad es lo que encontramos en esta nueva versión del filme de Sargent que protagonizaran Walter Matthau y Robert Shaw.
Una que otra secuencia de la película que pudo haber provocado cierta altura en el duelo interpretativo Denzel Washington-John Travolta se diluye entre choques, carreras de autos y acción contemplada a través de una cámara nerviosa. Ah Y los rehenes no nos importan nada. Eso es lo grave.