La construcción de la terminal de autobuses en las instalaciones del Parque del Este continuaba ayer a toda marcha pese a la reciente advertencia del alcalde de Santo Domingo Este de que el ayuntamiento procederá a paralizar esa obra en cumplimiento a la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que ordena la suspensión de esos trabajos hasta que se realice un estudio de impacto ambiental.
Alrededor de las 10:00 de la mañana se podía observar en el área de construcción a una veintena de obreros y máquinas de carga que trabajaban en una infraestructura de tres pisos cuyos cimientos parecen estar listos y a la que le faltan las paredes en el segundo piso.
La zona de trabajo era custodiada por militares adscritos al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), que permanecen en las entradas desde las 6:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde.
El alcalde de SDE, Manuel Jiménez, indicó el pasado viernes que el cabildo “debe utilizar todos los mecanismos legales y administrativos a los fines de que se paralice la obra, máxime cuando no se ha realizado un estudio de impacto ambiental y de intentar la compañía contratista seguir con la ejecución de la obra, y accionar legalmente en contra de la misma por su responsabilidad civil, por el desacato a la sentencia emanada por el TC”.
El ejecutivo municipal añadió que solicitará que se realice un estudio de impacto ambiental que sea desarrollado “por un organismo independiente o por un organismo internacional calificado en la materia”.
Obra cumple requisitos. El ministro de Obras Públicas, Ramón Pepín, defendió la continuación de los trabajos al alegar que la institución ha cumplido a cabalidad lo que estipulan las sentencias del TC y del Tribunal Superior Administrativo.
Aseveró que las sentencias ordenaban la paralización de la obra hasta que se cumplieran ciertos requisitos y que Obras Públicas ha obtenido la certificación del Ministerio de Medio Ambiente de no objeción a este proyecto y la autorización emitida el 13 de diciembre de 2018 por el Concejo de Regidores del Ayuntamiento de SDE, que aprobó el uso del suelo para la construcción.