México (EFE).- Los jueces encargados de la revisión de 11.839 mesas electorales han avanzado un 60 por ciento, al iniciar ayer el tercer día del recuento parcial de votos de la pasada elección presidencial mexicana, ordenado por el Tribunal Electoral. El recuento, que se lleva acabo desde el miércoles en 149 de los 300 distritos electorales en los que se dividió el país en las pasadas elecciones del 2 de julio, transcurre con tranquilidad aunque los partidos políticos difieren sobre la dimensión de las irregularidades detectadas hasta ahora. 

El recuento lo ordenó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tras las impugnaciones que presentó el izquierdista Andrés Manuel López Obrador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien considera que se cometió un fraude en su contra para arrebatarle el triunfo.

El representante del Partido Acción Nacional (PAN), Germán Martínez, dijo a la cadena “W-Radio” que los panistas siguen “tranquilos” e insistió en que lo hallado hasta ahora son “errores numéricos, aritméticos comprensibles en todas las elecciones del mundo”.

En el mismo programa radial, un portavoz del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Felipe Solís, indicó que en el recuento, que tiene como plazo el domingo para concluirse, “pareciera que no ha ocurrido nada”.

Sin embargo, señaló que en la norteña ciudad de Tijuana en algunos colegios electorales se encontraron “papeles en desorden”, y que en el estado de Yucatán (este), donde el recuento ha avanzado un 30 por ciento, en promedio se restaron cinco votos al PAN en cada mesa revisada.

Según el recuento oficial, el derechista Felipe Calderón (PAN) superó con 243.934 votos a López Obrador, lo que equivale a 0,58 puntos porcentuales, es decir unos dos votos por cada una de más de 130.000 mesas instaladas el día de la elección.

Solís señaló también que en una mesa en el estado de Jalisco (oeste) a López Obrador le contaron diez votos cuando en realidad obtuvo cien, y que “pudo haber sido un error o un acto doloso”.

Por el contrario, Arturo Núñez, del PRD, manifestó que en una gran mayoría de colegio electorales “hay modificaciones pequeñas y amplias” en el escrutinio.

“Están aflorando irregularidades adicionales: las bodegas no están bien vigiladas y muchos paquetes aparecen abiertos, además hay un gran número de mesas donde faltan y hay boletas (papeletas) de más”, aseguró.

Subrayó que en 1.327 mesas faltaban el jueves en la tarde 34.193 papeletas, lo que consideró “un número demasiado grande”, pero concedió que sea posible que los mismos electores se las hayan llevado.

No obstante dijo que “inexplicablemente” en 917 mesas aparecieron 13.857 votos extra, lo que evidencia que “se metieron más votos” en las urnas de los autorizados para cada mesa, que tiene un máximo de 750 electores cada una.

El TEPJF tiene hasta el 31 de agosto para analizar todas las impugnaciones presentadas por los partidos y hasta el 6 de septiembre para declarar al nuevo presidente de México.

Por su parte, simpatizantes de López Obrador que desde hace 12 días bloquean ocho kilómetros de calles en el centro de la capital mexicana, protestaron hoy en los accesos del Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Dirigentes del PRD argumentaron que con la protesta buscan condenar un supuesto acuerdo entre el SAT y la Secretaría de Hacienda para condonar el pago de impuesto a empresarios que apoyaron a Calderón en la campaña electoral.

Pide apoyo

MEXICO (AP).– El principal aspirante de oposición de México llevó el viernes su lucha por la presidencia del país a la palestra mundial, pidiendo a varias naciones en un artículo editorial publicado en el diario New York Times que apoyen su pedido de un recuento total de votos de los comicios del 2 de julio.

Andrés Manuel López Obrador también justificó las manifestaciones diarias de sus simpatizantes, que han estrangulado durante dos semanas el tráfico y comercio en la capital, diciendo que no puede costearse espacios en los medios de comunicación.

El viernes, decenas de simpatizantes del candidato trataron de bloquear la entrada de la Tesorería de la República por segundo día consecutivo.

El artículo de López Obrador es publicado en el tercer día de un recuento del 9% de las 130.000 casillas del país. El candidato oficialista, Felipe Calderón, tiene una ventaja de menos del 0,6%, unos 240.000 sufragios sobre López Obrador.

El dirigente de oposición afirma que se realizó un fraude, apoyado en una campaña de ataques en los medios, y que el recuento total de votos es la única forma de determinar quién es el presidente electo de México.

Luego de oponerse a la intervención de otros países, López Obrador pidió el viernes a las naciones del mundo que apoyaran su causa.

«Necesitamos la buena voluntad y el apoyo de aquellos en la comunidad internacional con un interés personal, filosófico o comercial en México, para animarlos a que hagan lo correcto y permitan un recuento total que demostrará, de una vez por todas, que la democracia está viva y en buen estado en esta república’’, dijo.

Las autoridades tienen hasta el domingo para terminar con el recuento parcial. El panel de siete jueces del Tribunal Federal Electoral estudiará los resultados y decidirá entonces si declara un ganador, anula los comicios o decide otro curso de acción.

El jueves, César Nava, secretario general del gobernante Partido Acción Nacional, dijo que se ha avanzado en un 40%o en el recuento y no se había encontrado mayores problemas. Agregó que se espera terminarlo el viernes por la tarde o a primeras horas del sábado.

López Obrador tiene programado viajar el sábado al estado sureño de Chiapas, donde su Partido de la Revolución Democrática lucha por la gubernatura.

Su partido acusó al presidente Vicente Fox de destacar sus programas contra la pobreza para influenciar las elecciones a realizarse el 20 de agosto en el estado más empobrecido del país. El director de esos programas, Rogelio Gómez-Hermosillo, negó el viernes que ese fuera el caso.