MOCA. Continuaban ayer en huelga de hambre nueve dirigentes reformistas y peledeístas en la sede de la gobernación de la provincia Espaillat, en demanda de empleos.
Los huelguistas se encadenaron en los barrotes del edificio de la gobernación, reclamando, además de empleos, derecho a la comida, para poder sobrevivir dignamente con sus familias. Quienes se encadenaron son el abogado David Balcácer Castillo, Juan Comprés (Guanchi), José Miguel Balbuena (Papo), Juan Manuel Martínez, María Isabel de León, María Teresa Jiménez, Miguel Antonio Santos Frías, Luciano Bautista y Enrique Félix (Barahona). Ellos permanecen atados desde el pasado lunes.