Sin estudios a los 16 años se limita la educación

Sin estudios a los 16 años se limita la educación

Vives en una facilidad tipo universidad y en lugar de dormir con 10 tipos en la misma habitación el número se reduce a cuatro o cinco. Tienes un laboratorio con computadores, hay internet y una consola de video juegos. Tienes tres comidas y un preparador físico, es quiere decir que en RD estas mejor que la mayoría de los muchachos de tu edad.

Lo que estos muchachos no consiguen es educación. MLB ha hecho un gran esfuerzo en los últimos 10 años construyendo academias en mi país, pero cada año, cientos de prospectos salen del beisbol sin nada que mostrar luego de miles de horas dedicadas a este juego. Las estadísticas son deprimentes. Menos de la mitad de los firmados para las academias llegan a Estados Unidos para jugar en la rookie.Solo un 25 por ciento llega a clase A.

Esta es la propuesta que le presentan a muchas familias dominicanas : Que su hijo deje la escuela a los 12 y tendrá 3 por ciento de probabilidad de jugar en las mayores. Lo hacen con gusto porque no tienen otra opción. Se imaginan semejante propuesta en una reunión de padres en un colegio norteamericano?

Ya puedo leer a unos cuantos en Twitter gritando: Y qué? Yo suplicaría por hacerlo de gratis.”

Y esas personas tienen razón. Esos niños se sienten de la misma forma. En mis 30 años jugando béisbol nunca he oído a un tipo decir; ¿Sabes qué? Eso fue injusto. Alguien me obligo a esta vida, no es lo que quería.” Es su única salida.

La diferencia entre ustedes y ellos es la siguiente: Gran parte de estos muchachos son enviados al mundo con una educación que llega al sexto curso, esto suena increíble pero no es ilegal en Estados Unidos. ¿Qué van hacer, volver al sexto curso a los 20? No tienen habilidades técnicas. No pueden ser electricistas o mecánicos. Se han pasado los últimos diez años de su vidatratando de ser una sola cosa. Muchos salen del juego sin dinero por la obligación que tienen de mandar dinero a su país para ayudar a sus padres, hermanos, primos, y a su familia complete. Muchas veces la gente olvida que una vez firman un contrato, la familia completa lo ve como el proveedor. Es mucha responsabilidad para un muchacho de 16 años.

El béisbol les da una salida pero la mayoría no llega y de forma automática regresan a la pobreza. Es un círculo vicioso.

Ahí radica la envidia de los muchachos dominicanos hacia los norteamericanos. En RD, no puedes conseguir un trabajo en McDonalds si no has completado la secundaria. Mientras el sueño real es llegar a las mayores, muchos de estos prospectos eventualmente saben que no van allegar, y de ahí en adelante entran en modo supervivencia, quedarse suficiente tiempo en las menores para hacerse ciudadano Americano o encontrar un empleo en Estados Unidos para poder enviar dólares a la familia.

Tiene que haber una mejor forma. Mientras la MLB ha hecho bastante desde el 2000 hacia acá, todavía hay espacio para mejorar. Los equipos deben priorizar la educación de estos muchachos o por lo menos ayudarlos con el idioma. Ahora mismo, algunos equipos están tratando, pero no hay una norma establecida. Los Diamondbacks de Arizona empezaron a ofrecer un programa que les permite a los prospectos obtener su diploma de secundaria mientras entrenan en su academia. Lo importante es que a pesar de que los despidan, los muchachos pueden completar el programa. Los 30 equipos deberían hacer lo mismo. Lo más sencillo es decir que no hay tiempo. Cualquier jugador de Grandes Ligas te dira que eso o es cierto. Si hay algún excedente de algo en el béisbol, es de tiempo. Que tanto puedes entrenar en un día, especialmente cuando tienes 16 o 17 años. Estos muchachos se pasan 8 horas al dia jugando y entrenando en las academias, el resto del día lo ocupan en las redes sociales o jugando con las consolas de video juego. Por qué no aprovechar el tiempo y obligarles a tomar clases de inglés o informática para que cuando el 97 por ciento salga del juego tengan herramientas para insertarse en el Mercado laboral?

Las Grandes Ligas pudiesen beneficiarse tanto de la educación como de las horas de entrenamiento, acondicionamiento y nutrición de estos jóvenes. Cuando digo esto no solo me refiero al punto de vista de relaciones públicas y moral, lo hago desde el punto de vista de los negocios también.

No sabria decirles cuantas veces he visto a un pelotero latino desarrollar una mala reputacion simplemente por la barrera del idioma o diferencias culturales. Ahora los equipos dan empleo a entrenadores que hablan español, pero la barrera del idioma sigue causando problemas.Cuando venía subiendo, como un jugador bilingüe, constantemente me llamaban a reuniones para que hiciera las veces de traductor entre dirigentes y jugadores. Cualquier malentendido tomaba 10 minutos para aclararse. Muchas veces escuchaba a los dirigentes decir que el jugador era haragán o terco y estaba sorprendido porque sabía que el béisbol era todo para ese tipo. Simplemente no tenía idea de lo que le estaban pidiendo. No sabía que el dirigente le estaba pidiendo que tomara más prácticas de bateo o que hiciera una rutina de cierta forma, y es ahí cuando yo entraba y le explicaba al jugador como hacer las cosas. “Perdón, mañana, mañana, estaré mejor mañana.” Luego todo el mundo feliz. Pero que hubiese pasado si yo no hubiese entrado a la reunión? Si el jugador no era considerado como un gran talento, probablemente le hubiesen señalado como arrogante, haragán o lo hubiesen dejado libre. La barrera del idioma es más profunda que un simple malentendido en el terreno. He visto como la falta de comunicación ha dado paso a tipos temerosos de entrar donde el preparador físico luego de lastimarse por miedo a la respuesta o que los dejen en libertad. Problemas pequeños que se convierten en lesiones que terminan carreras porque jugaron con el dolor, solo porque no entienden por completo cómo funciona el sistema. MLB ha dado grandes pasos para cerrar la brecha que existe en la comunicación, pero todavía hay espacio para mejorar. Si los equipos pusieran más de su parte y crearan un Sistema educativo para esos muchachos de 16 y 17 años. Cuantas carreras increíbles se pudieran salvar? Y cuantos millones de dólares para los equipos? Más importante aún, piensen en como mejoraría la calidad de vida de cientos de jugadores que no llegan.

El problema no va a desaparecer. Con el avance de las negociaciones entre Cuba y Estados unidos, hay literalmente millones de niños cubanos que se les presentara la misma propuesta que a los niños dominicanos. Es responsabilidad de Grandes Ligas mirar a esos niños como seres humanos y no solo prospectos.

Todos en el béisbol tenemos la misma debilidad: nos obsesionamos con los números. Existe una tendencia que ve a los jugadores como una colección de dígitos detrás de puntos decimales. ¿Cuál es el OBP de este muchacho contra zurdos? ¿Es el próximo Ken Griffey jr? ¿Es el próximo? Son niños. Debe ser tan importante para los equipos que un muchacho de 16 años de la República Dominicana pueda leer un libro que leer las señas del coach de tercera.

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