Hoy 
BONAPARTE GAUTREAUX PIÑEYRO
A nombre de la moralidad y del ejercicio sano de la política se hizo la campaña de 1978 con el objetivo no revelado de facilitar que el doctor Joaquín Balaguer permaneciera en la Presidencia.
Entonces se hizo la anti campaña, era restar votos al Partido Revolucionario Dominicano, atajar el caballo para que el otro ganara la carrera.
Luego, ante la realidad, la infame propuesta de desconocer la voluntad popular, obra de una sola persona comprometida con el atraso y la anti democracia, con una declaración insólita, a nombre de la organización que la desconocía.
Luego la acusación ante los tribunales contra Jacobo Majluta, chicana con la que se pretendía impedir el ascenso del PRD.
Llegados al poder en 1996, por efecto de una alianza entre iguales, que no es lo mismo que entre maco y cacata, salieron con la sábana por un canto, en el 2000, debido a una gestión a la cual se le quitó el cosmético y quedó al descubierto la enorme deuda interna, el desorden en el uso de fondos públicos y paro de contar…
El huracán George demostró su baja calidad humana: almacenaron las ayudas para los damnificados en los comités del partido, para repartirlos sólo a sus conmilitones.
En ese tiempo mataron a palos a un general de la Fuerza Aérea debido a la intolerancia y la prepotencia que exhiben siempre…y todo se quedó así.
Entonces inventaron un plan PEME para repartir dinero, mantener y aumentar la militancia, mediante cheques para miles de nombres de personas, el cual terminó en los tribunales.
Es el único grupo político cuyas hazañas han enriquecido el refranero: llegaron en chancletas y salieron en yipetas.
Cuando terminaron las vacas gordas del período 1996-2000, habían hecho tan buen acopio de comestibles que muchos de ellos no necesitaron trabajar.
Ni siquiera tuvieron los escrúpulos de María Gargajo, que tira la piedra y esconde la mano y, según una cáscara del mismo palo: Danilo Medina, usaron con largueza fondos públicos para comprar co-partidarios para que votaran por el pre-candidato Leonel Fernández.
Ahora aumentan el número de cheques a gente que no trabaja, incumplen la Ley de Gastos Públicos y retienen fondos de la seguridad social, multiplican el gasto en periodistas y comentaristas a sueldo, anuncian que la campaña será violenta y a poco tirotean una caravana, usan recursos del Estado en la campaña y, para colmo de las indignidades, se alían con un Senador que fuera acusado por ellos de uso indebido de fondos públicos, en una demostración de metamorfosis política digna de estudio para la historia de la infamia.
Son descarados. En un país donde no hay sanciones, actúan sin pudor ni temor. No lo permitamos.
