El síndico de Santo Domingo Norte, Jesús Féliz, declaró ayer  que ese ayuntamiento carece de los recursos para hacer frente a más de 40 cañadas que tiene   en su territorio  y que afectan la salud de casi cien mil personas.

Féliz apeló al Gobierno central para que junto al ayuntamiento busquen financiamiento exterior para desarrollar un programa que permita afrontar el daño que ocasionan las cañadas a la salud de dicha población  de Santo Domingo Norte y al ambiente.

Indicó que más del cinco por ciento de los  250 mil habitantes que tiene el municipio  Santo Domingo Norte  está siendo afectado por la presencia de las cañadas en el hábitat de mucha  gente.

El síndico Féliz declaró que, para su gestión, las cañadas “han representado casi  siempre un gran desafío que de manera permanente pone en peligro la salud de niños y adultos”.

Expresó que los desperdicios del drenaje pluvial y sanitario se juntan  en el entorno familiar, constituyendo un peligro permanente para la salud de los residentes en los barrios donde están las cañadas.

Dijo que el ayuntamiento, con los escasos recursos de que dispone, está procediendo a tapar algunas de esas cañadas.

Citó el caso de la de La Javilla, en la que el ayuntamiento trabaja para limitar sus efectos negativos en la salud de los munícipes. También citó las cañada de Los Platanitos de Santa Cruz, el Barrio Altagracia de Sabana Perdida, Canaán y otras.

Cree que no sólo con recursos del Gobierno central o  financiamiento con alguna entidad internacional se podría hacer frente a este problema.

“No son cañadas con las  características de la de Guajimía, pero sí con el mismo desafío que representa para la salud y el medioambiente”, manifestó  el síndico del municipio Santo Domingo Norte.  

La clave

1.  En una sola

El Ayuntamiento de Santo Domingo Norte sólo trabaja en los encaches de la cañada de La Javilla, porque no dispone de presupuesto para trabajar en algunas de las restantes 42  existentes en el municipio. El hedor que despiden las cañadas en los sectores donde están ubicadas se siente a distancia, lo que demuestra el daño que hace no sólo al ambiente y a las familias en cuyos sectores están ubicadas,  sino a las personas que circulan a corta distancia de las mismas.

Reclamos

Con  reiterada frecuencia las autoridades del municipio de Santo Domingo Norte deben hacer frente a reclamos  de munícipes que consideran que es tiempo de que se busque solución al problema porque  ven amenazada su salud. El problema, según reconoce el propio síndico Jesús Féliz y las familias afectadas, gravita más en la salud de  niños que son más indefensos  porque no saben cómo cuidarse del problema y porque no tienen quién  los vigile cuando sus padres salen hacia el trabajo o a buscársela a la calle porque no tienen un trabajo estable. Entidades comunitarias también  se han unido al clamor del síndico Féliz para que de alguna forma, el Gobierno haga sentir su aporte en la solución del grave problema sanitario.