Como parte de su tercera gira internacional, la Orquesta Sinfónica Nacional del Ecuador dio muestras de su bien ganado prestigio, dejando escuchar su admirable sonoridad, resultante de la perfecta ejecución de sus integrantes y la acertada conducción del maestro Emmanuel Siffert.
El programa escogido para el concierto del lunes en la sala Manuel Rueda de la capital, muestra la versatilidad de la orquesta al interpretar música de tres compositores: Anton Dvorak, Johann Strauss y Segundo Luis Moreno.
La Obertura de El Murciélago de Johann Strauss es una brillante apertura de programa.
La más famosa de todas las operetas es una obra maestra de inagotable inspiración melódica, en la que un vals magistral encabeza toda una serie de vibrantes números musicales pletóricos de humor offenbachiano. El programa continuó con la Suite ecuatoriana No. 1 de Segundo Luis Moreno, compositor, musicólogo y pedagogo ecuatoriano, considerado el creador de las bases de la etnomusicología folklórica ecuatoriana. En su famosa Suite de cuatro movimientos, se fusionan los aires indígenas andinos y mestizos, con tratamiento académico, en los que resalta una entrañable dulzura en el tratamiento de las cuerdas. La Salve gran señora, de naturaleza religiosa, la Danza de Sanjuanito, de origen precolombino, que recrea una estampa hermosa de raíces folklóricas, así como la Romanza sin palabras y el Rondó final, son una muestra del sincretismo cultural de esa nación, a los que la orquesta respondió con vigor y entusiasmo. Cerró con la Sinfonía No. 9 llamada Del Nuevo Mundo.
El director titular. Emmanuel Siffert nació en Suiza. Ha sido además director principal de la European Chamber de la Opera de Londres, de la Orquesta Sinfónica Aosta de Italia, jefe artístico y director del proyecto Swiss Symphonic and Operacomposers.