La artista América Olivo, oriunda de La Romana, quien realizó estudios en Bellas Artes e Ilustración en la Escuela de Diseño de Altos de Chavón y la licenciatura en Pintura en el Massachusetts College of Art, en Boston, fue la ganadora del premio “La Crítica de Exhibición Individual 2013”.

Olivo, quien ha participado en numerosas exposiciones individuales y colectivas, recibió este importante reconocimiento artístico gracias a su exposición titulada “SkinDeep” compuesta por 18 piezas, la cual estuvo en exhibición en Novocentro.

Esta creativa también ha realizado obras en hoteles y residencias. Una importante obra es el mural de la recepción del hotel Casa de Campo. Otras obras se encuentran en colecciones privadas en el país y en el exterior.

La artista informa que “Skin Deep” es su sexta individual y que es la culminación de un proceso creativo que tomó dos años en completar.

“Los trabajos hechos para ‘Skin Deep’, la exposición que realicé en noviembre del año 2013 en Novocentro organizada por la gestora cultural Amelia Calventi, están basados en la idea del ser humano como materia en el espacio terrenal”.

Así mismo refiere que representa el milagro de vida, como destellos de luces.

“Trabajé tela donde se simula la piel de una manera opuesta a la idea espiritual. ‘Skin Deep’ es una metáfora de la dualidad de la existencia humana”, dice.

Con relación al premio “La Crítica de Exhibición Individual”, Olivo refiere que para ella es un honor, un estímulo y una responsabilidad que la compromete más con el arte.

“Los premios de la crítica significan unas valoraciones de las artes visuales que contribuyen a más entrega y mejores curadurías. Es un reto permanente para el arte local, gestores y promotores, galeristas y coleccionistas”, explica.

Según expresa la crítico de arte Delia Blanco, América Olivo tiene experiencia en el tratamiento del tejido crudo, sea algodón o lino, sabe recoger el mínimo pliegue, corte, trazo o retal para sacarle la mayor expresión estética. Esta artista lleva varios años trabajando con las telas y parece dominar toda su plasticidad. Trabaja la materia tela que puede ser recuperada de lo que fue una sábana y reciclarla hasta convertirla en obra de arte.

Sin embargo, América aclara que como artista plástica no se cierra a ninguna técnica, pues “la obra dicta cuál técnica o método amerita ser usado”.

En cuanto a la proyección de su carrera, la artista no se adelanta. “Lo que será, llegará; trabajo a diario con intensidad y dedicación absoluta y con estímulo permanente. Es mi estilo de vida. Mi naturaleza, mi entrega. Mis obras son parte del mundo. Aspiro y persigo una proyección internacional significativa”, dice.