Sociedad  civil y partidos  políticos

Sociedad  civil y partidos  políticos

Buscando posibles escollos que impidan a la Sociedad Civil realizar sus actividades con eficacia y tener mayor capacidad para influenciar en el resto de las estructuras de sus países,  se determinó que en algunos sectores existía  confusión de objetivos, el que  se produce cuando sin darse cuenta empujan hacia el debilitamiento de los partidos, que por muchísimas razones se merecen críticas, pero se corre el riesgo de provocar vacíos que no pueda llenar ningún otro grupo dentro de un sistema democrático.

O sea, que la mejor forma de ayudar al fortalecimiento institucional no es mediante el  debilitamiento de los instrumentos idóneos para obtener poder político que son los partidos, desde donde pueden actuar bien o mal,  sino por el contrario, darle su apoyo para que los resultados sean buenos, porque no hay otra forma de alcanzar el poder por vía democrática que mediante los partidos políticos.

Sustituir los existentes implicaría crear o fundar nuevos instrumentos partidarios, que naturalmente sería con la mayoría de la gente que hoy participa y sin que nadie pueda asegurar que no caerán en las mismas prácticas que  se critican, si antes no se establecen mecanismos legales, claros y rígidos que impidan acciones al margen de la ética y la moral.

Por tal razón se recomienda tener mucho cuidado con actitudes que puedan inducir a desacreditar los partidos, porque solo el poder político sustituye al poder político, y solo mediante otros partidos se pueden sustituir a los ya existentes, porque no es posible lograr el control de los ayuntamientos, el congreso, el gobierno y los que se derivan de éstos como el poder judicial, electoral, contralor, etc., si no es mediante elecciones a través de estructuras partidarias.Si  entienden que los actuales no actúan adecuadamente o no representan los mejores intereses de la nación, tendrían que fundar nuevas organizaciones o mucho mejor entrar a formar parte de esas ellas y desde adentro procurar infundir nuevas ideas y aplicar nuevos métodos, de lo contrario todo sería aumentar la confusión.

Creo firmemente en la necesidad de una sociedad civil sana, pero igualmente  en la necesidad de un sistema de partidos fuerte, todos libres de contaminaciones, entiendo que la mejor forma de contribuir a su saneamiento  es aportando ideas y proyectos para que se fortalezcan las estructuras existentes; creando canales de conducción definidos, estrechos y difíciles de violentar; estableciendo penalidades a todos los niveles, comenzando por los funcionarios,  legisladores, síndicos y terminando por los  presidentes.

Creando mecanismos tan claros y definidos que nadie  pueda ignorar ni mucho menos ocultar.  Ya sea enriquecimiento por vía de corrupción, trafico de influencias, conflictos de intereses, narcotráfico, sobornos, etcétera y eso es muy fácil.

Esa es la gran tarea de las organizaciones de la sociedad civil, empujar para que este tipo de proyectos puedan aglutinar a toda la nación, pero afianzando nuestro sistema de partidos, porque cualquier otra cosa podría inducir a un vacío político, para ser llenado con aventuras.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas